La guerra por las audiencias entre La Revuelta de David Broncano y El Hormiguero de Pablo Motos llegó a su máximo esplendor el pasado jueves cuando el conductor del programa de La 1, Grison y Ricardo Castella dieron un golpe sobre la mesa y denunciaron en antena que su invitado había sufrido presiones del programa de Antena 3 para evitar que asistiera a la entrevista. Se trataba del campeón del mundo de MotoGP Jorge Martín, que tuvo que cancelar su entrevista con Broncano media hora antes de empezar a grabar. Han sido muchos los rostros conocidos que se han referido a este asunto, y el último en hacerlo ha sido el periodista y también presentador Jordi Évole.
A través de su artículo de opinión semanal en La Vanguardia, Jordi Évole ha lanzado una profunda reflexión sobre lo sucedido entre ambos programas con el ojo puesto en la acusación del empresario y supuesto conseguidor de la trama Koldo, Víctor de Aldama, a Pedro Sánchez, pero con referencias expresas a la lucha entre Broncano y Motos. ‘La España de Celeste y Aldama, de Broncano y Motos’ titula el artículo.
“Este es un país tan extraordinario que un delincuente confeso como Aldama acusa al presidente del Gobierno de ser un corrupto y dice tener pruebas de ello, y al día siguiente el tema de apertura en el telediario es que un programa de tele le ha robado un invitado a otro programa de tele. Celtiberia show”, señala.
Acto seguido, Évole describe la maniobra de La Revuelta, desvelando dicho día la supuesta presión que ejerce El Hormiguero sobre los invitados, como “otra jugada maestra de Pedro Sánchez, acusado de ser el cerebro de uno de esos dos programas”. “En el otro no le tienen mucho cariño”, aclara en el mismo sentido, en referencia a las constantes críticas de Pablo Motos o sus colaboradores al Gobierno de Sánchez.
“Seguro que fue de la mente bolivariana de Sánchez de donde salió la ocurrencia de poner un documental de animales de La2 en La1 en horario de máxima audiencia”, indica, bromeando con que ha sido una “cortina de humo que nadie vio venir”: “La berrea de unos ciervos ha acabado haciendo más ruido que las declaraciones de un corrupto”.
Y, después, el periodista lanza su augurio para lo que cree que ocurrirá este lunes, cuando ambos presentadores vuelvan a luchar por liderar la audiencia en sus franjas: “El lunes, ambos programas volverán a coincidir en horario. No descarten que el programa acusado de robo cuente su versión y siga el culebrón. La polarización y sus consecuencias. En la época de García y De la Morena no se hablaba de polarización y pasaba tres cuartos de lo mismo”.
Para terminar, Jordi Évole señala que lo importante es que los españoles puedan disfrutar, también en el prime time, “de una trinchera” donde protegerse: «Que las dos Españas tengan algo para arrojarse en cualquier franja del día. Como cantaba Sabina jugando con Machado, ‘Telespañolito que ves la tele, te guarde Dios, uno de los dos canales ha de helarte el corazón”
