El 41 Congreso Federal del PSOE, que se celebrará a finales de noviembre en Sevilla, tendrá que resolver las tensiones internas que han surgido por el compromiso de Pedro Sánchez de ceder a la Generalitat de Cataluña la recaudación de todos los impuestos, mediante un concierto similar al del País Vasco y Navarra.
Al menos seis federaciones del PSOE (las de Madrid, Aragón, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Galicia y Extremadura) han aprobado enmiendas al apartado de financiación autonómica de la ponencia que se debatirá en el Congreso de Sevilla.
La ponencia oficial no hace ninguna referencia al cupo catalán, ni al pacto suscrito con ERC para sacar a esta Comunidad autónoma del régimen común de financiación.
Pero sí incluye el compromiso de reformar el sistema de financiación autonómica para que «todas las comunidades autónomas dispongan más recursos que en la actualidad».
En línea con lo pactado en Cataluña, propone «federalizar la dirección de la Agencia Tributaria para dar más capacidad de decisión a las Comunidades Autónomas» y «desplegar una estrategia en red con las haciendas autonómicas».
También alude a la necesidad de «negociar un alivio de la deuda pública de las Comunidades Autónomas generada durante la crisis financiera». El PSOE ya ha negociado y pactado con ERC la condonación de los 15.000 millones de euros de deuda de la Generalitat.
En otro apartado, la ponencia del PSOE critica que el actual sistema de financiación autonómica «genera una redistribución donde las comunidades autónomas con mayor capacidad fiscal acaban recibiendo menos recursos que otros territorios«.
Esta «redistribución» que el PSOE cuestiona ahora (como lo han venido haciendo Junts y ERC durante años) es la que permite que las comunidades más ricas contribuyan al sostenimiento de los servicios públicos de las que generan menos ingresos.
El nuevo mecanismo de financiación, dice el PSOE, debe compatibilizar «multilateralidad y bilateralidad con un común denominador conciliable con el adecuado, que no privilegiado, tratamiento de las singularidades«. Y matiza que «el mantenimiento de la solidaridad» entre las regiones debe implicar también el «igual esfuerzo fiscal» entre las mismas.
El documento también incluye una carga de profundidad contra los ejecutivos regionales del PP. Pese a prometer una mayor «capacidad fiscal normativa» a las comunidades autónomas, señala que hay que evitar «la competencia a la baja en impuestos como Patrimonio, Sucesiones o los tramos más altos del IRPF«. Se trata, precisamente, de los tributos que los gobiernos del PP han rebajado, dentro de sus competencias.
Estas son las principales enmiendas que las federaciones críticas del PSOE han aprobado y defenderán en el Congreso de Sevilla.
Madrid
El PSOE de Madrid, que lidera Juan Lobato, pide que el nuevo sistema de financiación responda al principio de «justicia social«. Es decir, que cada comunidad aporte «conforme a su capacidad económica y reciba según sus necesidades», en contra del criterio impuesto en la ponencia oficial.
Otra de las enmiendas que defenderá el PSOE madrileño reclama que la Agencia Tributaria «siga siendo un elemento central» en la gestión de los tributos en toda España, en lugar de trocearla, como pretende la actual dirección nacional del partido.
Estas enmiendas son aprobadas por las bases —en concreto necesitan el apoyo del 30% de la militancia de la federación provincial— y no por las direcciones autonómicas, informa Europa Press.
Castilla-La Mancha
El PSOE de Castilla-La Mancha ha incluido en sus enmiendas la propuesta de Emiliano García-Page de aprobar una ley de armonización fiscal. Con esta norma, Page pide garantizar que los españoles deben tener las mismas obligaciones fiscales, del mismo modo que tienen el derecho a acceder a servicios públicos equiparables, independientemente del lugar donde vivan.
El barón socialista ha calificado de «obsceno» y «bochornoso» el pacto suscrito por su partido para ceder a la Generalitat la recaudación de todos los impuestos. Defiende que el nuevo modelo de financiación autonómica debe ser fruto una negociación «multilateral» y que los recursos se deben redistribuir entre los españoles, no «entre territorios».
Galicia
Aunque el secretario general del PSOE gallego, José Ramón Gómez Besteiro, es uno de los dirigentes regionales más fieles a Pedro Sánchez, el PSOE de Pontevedra ha aprobado varias enmiendas en las que pide eliminar de la ponencia la federalización de la Agencia Tributaria (al igual que la federación madrileña).
El PSOE de Pontevedra también advierte que «un pacto puntual entre partidos en una comunidad autónoma», como el suscrito por los socialistas catalanes con ERC para la investidura de Salvador Illa, no puede condicionar el «ideario político general» del partido.
Extremadura
Aunque por el momento no desvelan su contenido, los socialistas de Extremadura también confirman que han aprobado enmiendas al apartado de financiación de la ponencia del Congreso.
Su líder regional, Miguel Ángel Gallardo, reclamó el pasado mes de agosto (sin éxito) una reunión urgente del Consejo de Política Federal del PSOE para debatir la cesión de todos los impuestos a Cataluña.
Gallardo defiende un sistema de financiación autonómica basado en principios como «la igualdad, la justicia social, la certeza, la estabilidad y el equilibrio» entre regiones.
Castilla y León
El PSOE de Castilla y León, que lidera Luis Tudanca, ya adelantó que presentará enmiendas para que el nuevo sistema de financiación autonómica se base en los principios defendidos en la declaración de Santiago, que ocho presidentes autonómicos (del PP y del PSOE) aprobaron en 2021.
En aquella cumbre, los presidentes autonómicos defendieron que el nuevo mecanismo de financiación debe tener en cuenta criterios como la dispersión, el envejecimiento, la despoblación, la superficie y el coste efectivo de la prestación de los servicios públicos en cada comunidad.
Aragón
El secretario general del PSOE de Aragón, Javier Lambán, denunció que la decisión del Gobierno de sacar a Cataluña del régimen común, para otorgarle el concierto económico, «atenta contra la Constitución«. Esta federación ha planteado enmiendas en las que reclama una financiación autonómica y local «justa», y sin trato privilegiado para determinadas regiones.