Cuando Wuyeh se despidió de su familia no sabía si volvería a verlos. Con solo 12 años subió a un cayuco con el objetivo de llegar a Canarias. Atrás quedaban las abarrotadas playas de su pueblo natal, Fateh, al oeste de Gambia. Una pequeña localidad pesquera de apenas 15.000 habitantes, con calles de arena y uno de los mercados más populares del país, donde las oportunidades para los jóvenes escasean.

Fuente