Una nuevaDANA inunda varios puntos de Málaga, dos semanas después de las inundaciones en Valencia. La preocupación aumenta por momentos y muchos vecinos han perdido sus negocios o sus coches.
Más de 3.000 personas han sido desalojadas, mientras los colegios o los centros de salud han permanecido cerrados. En Y ahora Sonsoles hemos podido hablar con Francisco de la Torre, el alcalde, que asegura que ha tomado medidas con rapidez.
Sin embargo, hay personas, como Pablo, que están obligados a ir a trabajar. Él es sanitario y debe hacer un turno de noche de urgencias en un centro de salud mental, aunque no puede ni salir de casa.
«Vivo a 200 metros de la riada y la calle está desbordada entera«, nos cuenta. ¿Le obligarán a arriesgar su vida para ir a trabajar?