Mask Singer continúa sorprendiéndonos con cada desenmascaramiento. En el tercer programa llegaba Brócoli, una nueva máscara que no pudo superar su truelo con Mosca y Corazón, por lo que tuvo que desvelar su identidad nada más llegar. ¡Se trataba de Miguel Ángel Revilla!
El político cántabro supo despistar a Alaska y Ana Milán, aunque Los Javis tuvieron claro que se trataba de él. Tras ser desenmascarado, Miguel Ángel Revilla nos ha contado cómo se preparó su llegada a Mask Singer.
El político nos ha confesado que se dijo “ahí no estaré yo nunca” cuando vio el programa, pero enuna llamada de teléfono le convencieron para ser Brócoli en esta cuarta edición de Mask Singer. Revilla, que suele acudir a programas de opinión y mostrar su semblante más serio, esta vez aceptó ir a un programa de entretenimiento para deleitarnos con su faceta de cómico.
“No me veía, pero cambié de opinión”, nos desvela Revilla tras ver un programa de Mask Singer, para saber a qué se enfrentaba. Eso sí, había algo con lo que no contaba, y era el disfraz de Brócoli: “Si me llegan a advertir que voy debajo de esta cabeza, no vengo”, ha señalado con una sonrisa torcida el político.
Porque, al fin y al cabo, Revilla tiene 81 años, y el disfraz por momentos ha supuesto un hándicap para él, sobre todo los zapatos: “Son terribles”, ha añadido el político cántabro. El peso del disfraz no era el adecuado, según apunta Miguel Ángel, algo que no ha podido dejarle disfrutar del todo sobre el escenario, privándole de enseñarnos algunos de sus ‘pasos prohibidos’. ¡Dale al play y no te pierdas todo lo que nos ha contado!