BERLÍN, Alemania — El gobierno alemán mantiene desde hace tiempo una advertencia de viaje a Irán y ha instado a sus ciudadanos a abandonar el país, advirtiendo del peligro de ser tomados como rehenes, como ocurrió en el caso de un ciudadano germano-iraní ejecutado en Teherán, señaló un portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores en Berlín.
“Hemos emitido desde hace tiempo una advertencia de viaje a Irán y solicitamos a los alemanes en ese país que lo abandonen, ya que hemos visto, como en el caso de Jamshid Sharmahd, que Irán toma como rehenes a ciudadanos alemanes”, declaró el portavoz en una conferencia de prensa gubernamental.
Añadió además: “Queremos evitar que otros ciudadanos alemanes enfrenten este mismo destino”.