Un estallido de solidaridad ha prendido con fuerza en València y su área metropolitana. Miles de personas, desde primera hora de la mañana, se han auto organizado a través de las redes sociales y grupos de mensajería instantánea para salir hacia los pueblos afectados con palas, escobas o cubos. Un éxodo masivo sin precedentes para ayudar a quienes más lo necesitan. Las escenas resultan muy emocionantes. Sin duda, el hecho de que sea festivo por el Día de Todos los Santos, está favoreciendo esta masiva movilización ciudadana.
Desde zonas como el polígono Vara de Quart, donde hoy es relativamente fácil aparcar al ser festivo, Sant Isidre, Sant Marcel·lí, Patraix, Malilla, la Creu Coberta, Camí Real y otros barrios del sur de la ciudad de València, numerosas personas (en su gran mayoría jóvenes) han decidido sumarse a las tareas de limpieza, desescombro y provisión de víveres para las personas afectadas de Paiporta, Benetússer, Sedaví, Massanassa, Catarroja o Albal. También desde pueblos como Torrent, Aldaia, Alaquàs o Xirivella han salido cientos de vecinos a ofrecer su ayuda. Por otro lado, en pueblos como Quart de Poblet también se están organizando «colles» para ir a limpiar a Aldaia y Alaquàs, andando, con cubos, cepillos y fregonas; y con agua y alimentos para atender a las personas que más lo necesitan.
La organización ciudadana es tal, que incluso circulan por las redes mapas con rutas de acceso a pie en las que se indica dónde aparcar los vehículos y por dónde acceder a las zonas afectadas.
Por otra parte, el reparto de alimentos, aunque se está centralizando en puntos concretos de la ciudad como los campos de Mestalla o Ciutat de València, cientos de personas han decidido organizarse por su cuenta para llevar garrafas de aguas y todo tipo de alimentos. Los transportan a en bici (por ejemplo hay un centro de reunión en La Rambleta), moto e incluso a pie después de recorrer decenas de kilómetros.
La Unió, al rescate
Por otra parte, la Unió Llauradora i Ramadera colabora con tractores y palas de sus personas asociadas en diversas zonas afectadas por la dana para ayudar en todas aquellas tareas en la que se les requiere, como es por ejemplo quitar el barro y apartar coches para despejar calles y carreteras.
La organización pone así a disposición de Administraciones, Ayuntamientos y personas afectadas todos los medios a su alcance para colaborar en la medida de sus posibilidades en la minimización de los daños de esta catástrofe.
Carles Peris, secretario general de LA UNIÓ, indica que “los tractores de la gente de LA UNIÓ vuelven a salir a las calles, pero esta vez no para reivindicar nuestra problemática, sino para apoyar, como ya hicimos en 2020 con el Covid. Volvemos a solidarizarnos, a estar junto a nuestros compañeros, vecinos, con la sociedad valenciana que lo está pasando mal”.