Madrid se encuentra ante un giro considerable respecto a su sistema de transporte colectivo, después de que el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible decidiera poner fin a uno de los subsidios o ayudas que había estado vigente. Esta nueva normativa, que comenzará a entrar en vigor en 2025, tanto a lo que se refiere a los precios de los abonos de transporte como a la accesibilidad de determinados colectivos.
Cambios clave en la política de transporte de Madrid
Hasta la fecha actual el sistema de transporte en Madrid ha presentado descuentos de hasta un 60% en billetes y abonos de las modalidades más diversas, como por ejemplo abonos de Metro, Cercanías, autobuses interurbanos y otras. Pero estos descuentos dejarán de aplicarse a finales del año 2024. El Ministerio de Transportes justifica esta decisión basándose en la afirmación de que dado que la situación económica ha mejorado, ya no es necesario mantener estos subsidios masivos, en lo que ya el Ministerio de Transportes se refiere a la aplicación de nuevas tarifas y nuevas condiciones de uso ya empiezan a preocupar al respeto de la ciudadanía.
Límites de uso gratuito del transporte en Madrid
Los abonos de Renfe exentos de costo para las personas usuarias habituales, para la obtención de los cuales solo era necesaria la entrega de una fianza, cesarán en 2025. De igual forma, otras bonificaciones tales como las que elevaban a un 60% los abonos del metro de Madrid desaparecerán. De este modo, las personas tendrán que hacerse cargo del precio de todo el transporte, salvo en algunos supuestos que comentaremos, y que se especifican a continuación.
Nuevos precios del transporte público
A partir del año que viene se observa un aumento considerable en los precios de los abonos. Por ejemplo, el abono de la Zona A pasa de costar 21,80 euros, 54,60 euros; el abono joven de todas las zonas subirá de 8 euros, 20; otros abonos, por ejemplo, los de las zonas B1 y B2 también existen considerables aumentos.
Por otra parte, en el servicio de Cercanías Renfe los precios de los billetes de un viaje y los abonos mensuales también experimentan subidas en cada uno de sus tipos, lo que supone una posible subida del coste del transporte para los usuarios que lo utilizan cotidianamente.
Innovaciones en descuentos para colectivos específicos
Para hacer frente y poder mitigar el impacto de estas subidas, se mantendrán algunos de los descuentos para ciertos sectores vulnerables y para algunos colectivos concretos, intentado hacer las modificaciones de una manera más selectiva; es decir, centrando la ayuda en aquellos que verdaderamente la necesitan.
Beneficiarios de los nuevos abonos
El ministerio señala que el descuento se aplicará a los mayores de 65 años, ya que el abono se seguirá concediendo de forma gratuita a este grupo. Las ayudas a las personas que se encuentran en situación de vulnerabilidad económica continuarán, y por tanto también a las familias en situación de ingresos bajos y jóvenes estudiantes. Algunos usuarios asiduos pueden también disfrutar de descuentos especiales.
Ajustes de tarifas de transporte para una mejor accesibilidad
El Comité Español de Personas con Discapacidad (CERMI) ha pedido que el nuevo plan de tarifas incluya un descuento para las personas con discapacidad reconocida, grupo que podría ser afectado por la prevista eliminación de las bonificaciones generales, de tal manera que se asegure que la accesibilidad se encuentre presente en los provistos de transporte.
Impacto en los usuarios
La nueva normativa del transporte genera preocupaciones en los usuarios, los cuales tendrán que habituarse a la liquidación de las tarifas completas de sus desplazamientos cotidianos. La eliminación de abonos que no efectuaban su pago haría que muchos trabajadores o estudiantes con dependencia del transporte colectivo se vieran sometidos a una importante elevación de sus gastos si únicamente hacen uso de este medio de transporte. De hecho, incluso puede provocar un desplazamiento a otros tipos de medios de transporte en bicicleta, en patinete, a compartir el coche, lo que podría conllevar a su vez una considerable elevación del nivel del tráfico rodado en la ciudad.
