El Teatro Campoamor de Oviedo acoge este viernes la entrega de los Premios Princesa de Asturias, presidida por los reyes Felipe y Letizia, acompañados por la princesa Leonor y la infanta Sofía.
Esta ceremonia se ha convertido en uno de los eventos más destacados del año. Al acto en el Campoamor, y después a la recepción en el Hotel Reconquista, asisten numerosas personalidades de muy distintos ámbitos de la sociedad española.
No hay más que citar algunos nombres de los invitados a la gala de 2023: los presidentes del Congreso, Francina Armengol, y del Senado, Pedro Rollán; el presidente del Tribunal Constitucional, Cándido Conde-Pumpido; la vicepresidenta de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, y los ministros de Cultura, Miquel Iceta, y Agricultura, Luis Planas; Adolfo Suárez Illana; la ex ministra del PP y ex presidenta del Congreso Ana Pastor; el ex ministro de Ciencia Pedro Duque; el presidente de la CEOE Antonio Garamendi; Alicia Koplowitz; el duque de Alba; el tenista Feliciano López; el atleta Abel Antón; periodistas como Pedro J. Ramírez, Elena Sánchez (entonces presidenta de RTVE) y Juan Ramón Lucas; Paloma Rocasolano (madre de la reina Letizia)…
Pues bien. El Chivato pudo comprobar que este jueves, víspera de la entrega de premios, uno de los vuelos que conecta Madrid con Asturias reunió a unas cuantas personalidades que iban a asistir a la ceremonia de la Fundación Princesa de Asturias.
En el Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas se vio a Ana Pastor. Quien fue ministra de Sanidad en el Gobierno de Aznar, de Fomento con Rajoy, y presidenta del Congreso de los Diputados en la legislatura 2016-2019, hizo cola para subir al avión y tomó asiento en primera clase.
Menos ordinaria fue la llegada de Álvaro García Ortiz para ese mismo vuelo. El Fiscal General del Estado llegó hasta el avión en una furgoneta negra, con los cristales tintados y con el logo de Iberia.
García Ortiz iba acompañado por dos empleados de Iberia, vestidos con traje de chaqueta azul marino. No subió al avión hasta que entraron el resto de pasajeros.
Álvaro García Ortiz es el primer Fiscal General del Estado que resulta investigado por el Tribunal Supremo, en este caso por un presunto delito de revelación de secretos, relacionado con la nota de prensa que difundió la Fiscalía sobre el pacto que negociaba con Alberto González Amador, pareja de Isabel Díaz Ayuso.
No deja de ser curiosa cierta coincidencia de detalles con otro de los escándalos que persiguen al Gobierno.
El aeropuerto de Madrid está de actualidad estos días por el informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil sobre la llegada a Barajas, en 2020, del avión de la vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, que tenía vetada la entrada al territorio de la Unión Europea.
La noche que ese vuelo tocó tierra en España, que tanto ha dado que hablar (e investigar), también hubo furgonetas negras circulando por las pistas del aeropuerto.
En el caso de Álvaro García Ortiz, cabe suponer que el fiscal general del Estado llegó así al avión por cuestiones de seguridad.
