Agentes de la Comisaría Provincial de Burgos detuvieron recientemente a un varón como presunto autor de un delito de malos tratos hacia su pareja, ocurrido una tarde-noche del pasado mes de septiembre cuando ambos se encontraban alojados en un establecimiento de hostelería del distrito Este de la ciudad.
Una llamada del responsable del hotel informando de la posible agresión entre una pareja, clientes del establecimiento, motivó que agentes de la Policía Nacional acudieran hasta allí. En la recepción del local los policías hallaron tanto al varón como a la víctima, esta última escondida en una zona contigua.
La mujer se encontraba visiblemente nerviosa y relató que había mantenido una discusión con el varón -su pareja sentimental desde hacía un año- motivada por los celos del él. Durante la disputa, el varón la habría empujado contra la pared logrando quitarle su teléfono móvil, lanzándolo por la ventana de la habitación que ocupaban.
Además, relató que seguidamente la amenazó de muerte empuñando una navaja diciéndole ‘Te voy a matar y después me mato yo, tú no te vas de aquí’. En un descuido ella consiguió arrebatarle el arma y escapar hacia la recepción para pedir ayuda, según informaron hoy fuentes de la Subdelegación del Gobierno.
Protocolo
Inmediatamente los actuantes activaron el protocolo para que la mujer recibiera atención médica, informándole de igual modo de los derechos y recursos que como víctima tiene a su disposición. De manera inmediata se procedió a la detención del hombre, quien de forma espontánea admitió haber discutido con su pareja, negando la agresión y las amenazas.
La víctima presentó la correspondiente denuncia en la Comisaría Provincial, ampliando detalles de su relación con el detenido, que se remonta un año atrás, con episodios previos de insultos y discusiones violentas. A la denuncia se incorporó una solicitud de orden de protección admitida por el Juzgado competente. Dicha autoridad ha emitido contra el varón una prohibición de acercarse y comunicarse por cualquier medio con la víctima por un periodo de dos años y medio.
