El Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento (Seis) de Las Palmas de Gran Canaria tendrá un nuevo camión autobomba para ayudar en las tareas para apagar incendios. La adquisición de este vehículo ha salido a licitación junto a la de otro tipo ranchera para la unidad de mando y jefatura por 550.000 euros. El cuerpo de la capital está en plena renovación de sus equipos técnicos, una de las principales reivindicaciones de la representación sindical de los agentes.
Según estipulan los pliegos de la licitación, publicada el pasado 26 de septiembre, el vehículo autobomba será de tipo tractor, con cabina simple con capacidad para tres pasajeros. Esta deberá poder ser abatible para poder tener acceso al motor, que será de tipo diésel y capaz de alcanzar al menos velocidades de 90 kilómetros por hora en terreno llano. En cuanto a las medidas, deberá tener una anchura de igual o inferior a 2,5 metros y una longitud igual o inferior a 6,5 metros.
La altura deberá ser inferior a 3,5 metros. La cisterna deberá tener una capacidad para almacenar 3.500 litros de agua y será de un material plástico. La bomba de extinción deberá tener una presión combinada, es decir, capaz de lanzar un caudal superior a 3.500 litros por minuto a 10 bar; o 400 litros por minutos a 40 bar en función de la presión. Deberá permitir el lanzamiento de agua a alta o baja presión, el llenado de la cisterna a través de la bomba y la realización de estas maniobras de manera simultánea.
Tres camiones por 1,7 millones
También ha salido a licitación la compra de un vehículo tipo pick up o ranchera 4×4 para la jefatura y unidad de mando. Deberá tener capacidad para cinco personas, motor turbodiésel y gancho para remolque. La zona de carga tendrá una zona de almacenaje con compartimentos y otra con un armario abierto extraíble.
El Ayuntamiento ya sacó a licitación el pasado agosto la compra de tres camiones por 1,7 millones de euros. En este caso, deberán contar con cisternas para 2.000 litros de agua, además de estar equipados con mantas, camillas o desfribiladores. Las dimensiones de estos vehículos están pensadas para poder maniobrar en calles de difícil acceso, estrechas o con cuestas, de la ciudad. También se han licitado los equipos para la excarcelación de personas en accidentes viales.
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