Luis Suárez se dejó ir ayer en declaraciones al programa ‘De fútbol se habla así, en el que fue tremendamente duro con el seleccionador nacional de Uruguay, Marcelo Bielsa. El delantero del Inter Miami le deja en un muy mal lugar por su gestión del grupo y su altanería. «En la Copa América hubo situaciones que me dolieron, que no las dije por el bien de la convivencia», dice.
Suárez se refirió específicamente al trato que Bielsa tuvo con Agustín Canobbio, al que utilizó poquísimo: «A Canobbio lo apoyo por lo que sucedió. Muchos días lo puso a hacer ejercicios con los futbolistas que fueron como sparring y eso es una falta de respeto absoluto». «Muchos jugadores hicieron una reunión para pedirle al entrenador que por lo menos nos dijera buen día, ni saludaba».
El ex del Barça comenta que un episodio con el ex del Athletic: «Bielsa hace una conferencia y habla cosas maravillosas de la gente y en Nueva York hubo un día que nos pidió que no paráramos a saludar a la gente; yo me paré y le dije que a la gente la íbamos a saludar de todas maneras. Un día yo tuve una charla con Bielsa de 5 minutos hablando como referente y al terminar solo me respondió ‘muchas gracias'».
La ‘extraña’ fuga de Matías Vecino
Suárez criticó también la gestión del grupo del seleccionador: «En el Complejo Celeste a los empleados no los dejan pasar y saludar y comer con nosotros. Se tienen que cuidar hasta por la puerta donde tienen que entrar. Me parte el alma que en el Complejo se viva así hoy día. Matías Vecino fue el primero que la vio venir. ¿Nadie se pregunta nada que un tipo como Vecino, con solo 30 años, se fue de un día para otro?».
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Al final de la entrevista, Luis Suárez hace una petición: «El día de mañana le pido a la gente que no se la tome con los jugadores si algo no viene bien. Bielsa ha separado a todo el grupo, hasta de la forma que tiene para entrenar».
