Con el actual formato de Copa de Europa lo mejor para el espectador que puede permitirse el lujo de pagar por el fútbol europeo es poder enchufarse al canal de multichampions. Hay partidos tan buenos que cuesta elegir. Llegan a coincidir del mismo país, a la misma hora y tras las dos primeras jornadas nadie puede negar que es un espectáculo. Y hay sorpresas. Todo se irá ajustando, pero los clubs de la Liga francesa están despuntando y no precisamente el PSG. El Brest se ha metido segundo en la clasificación que lidera el Borussia y en la que el Benfica es tercero. El Barça deberá enfrentarse a los tres, y al Bayern.

El Aston Villa de Emery también se ha colado y cuenta con el apoyo de la realeza británica. El Liverpool quiere volver a sus mejores épocas; Xabi Alonso ve una oportunidad en esta Champions tras conseguir la Bundesliga con mucha autoridad, mientras la Juventus de Thiago Motta entusiasma. Estos siete han ganado los dos encuentros y se cuela en el octavo puesto el City que ha logrado solo cuatro. El PSG sufrió más de lo previsto frente al Arsenal, pero Lille, Brest y Mónaco mostraron poderío en este inicio de Superchampions, seguramente más que en su propio campeonato. Pero con solo dos jornadas son la revelación de esta Copa de Europa.

El sorteo que empareja a los grandes con dos equipos de su mismo bombo logra que existan partidos excelentes en esta primera fase. La sensación es que todo está en una madeja y que es posible que el goal average pueda decidir mucho al final de los ocho partidos que todos deberán jugar. Por eso se repite tanto que es importante marcar goles, ya que no vale el particular sino el general. Los tres puntos son vitales, aquí no se puede hacer estrategia como se hacía en el grupo de la fase de liguilla de antes, ya que se compite contra todos. Y un empate parece una derrota. Las dos últimas jornadas en enero pueden ser de infarto. Pero de momento lo que queda claro es que hay excelentes encuentros, que vale la pena ver en el formato múltiple para no perderse detalle. No es lo mismo, pero el espectáculo aumenta.



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