La demanda de tratamientos de ortodoncia en los adultos se ha disparado en los últimos años. ‘Brackets’, ortodoncias invisibles… Cada vez son más los españoles mayores de edad que se apuntan a la moda de tener una dentadura perfectamente alineada. La mayoría lo hacen por cuestiones estéticas, advierten los odontólogos. Algunos estudios hablan de un aumento, en solo un año, de hasta un 39% en la demanda, especialmente gracias a la popularidad de los alineadores invisibles. Si una década atrás, de cada 10 ortodoncias, siete eran ‘brackets’ y tres, alineadores invisibles, ahora la tendencia se ha invertido: un 70% de las ortodoncias son alineadores invisibles. «Hay un verdadero ‘boom'», certifican los especialistas consultados para este reportaje. Pero también advierten del fraude que se esconde a menudo tras algunas empresas que comercializan estas ortodoncias.
En solo un año, ha habido un aumento de hasta un 39% en la demanda, especialmente gracias a la popularidad de los alineadores invisibles
«El ‘boom’ de las ortodoncias, sobre todo las invisibles, ocurre porque hace 10 años se puso muy de moda una empresa, Invisalign, hizo un márketing muy fuerte y puso de moda una cosa: la ortodoncia para todas las edades, sin necesidad de brackets», explica Florencio Páez, jefe de Servicio de Odontología del Hospital HM Nou Delfos-HM Dental Center. A raíz de esto, muchas más empresas comenzaron a comercializar férulas transparentes para el paciente, «incluso sin necesidad de dentista». Y aquí surge el problema.
«Estamos viendo un aumento de pacientes que no han llevado la ortodoncia bien nivelada y ello genera problemas asociados, desde cefaleas a acúfenos»
Florencio Páez, jefe de Servicio de Odontología del Hospital HM Nou Delfos-HM Dental Center
«Muchas de estas empresas te escanean la boca y te envían la férula a casa, sin supervisión de un especialista, que debe ser el ortodoncista [la ortodoncia es una rama de la odontología]. Es la línea entre lo moralmente correcto y lo que no lo es», cuenta Páez, quien avisa de que, a consecuencia de esto, los odontólogos están viendo «muchos problemas» asociados. «Las ortodoncias, sean del tipo que sean, deben ir controladas por un profesional muy cualificado», recalca.
Dolores en las articulaciones
Los estudios de ortodoncia son adicionales a la Odontología y los realizan los ortodoncistas. Los tratamientos suelen requerir de hasta tres años de seguimiento. Si no se hacen correctamente, puede surgir algún «problema». Por ejemplo, como señala Páez, puede generar dificultades en el cierre de la boca, lo cual genera ruidos y dolores en las articulaciones. «Con toda la sintomatología que eso acarrea: cefaleas, migrañas, acúfenos… Todo esto lo estoy viendo yo: pacientes que no han llevado la ortodoncia bien nivelada y que no mueven correctamente la boca. Estamos viendo un aumento de estos problemas; cada vez hay más ortodoncias y estos son problemas asociados», asegura.
«Pueden ser dientes rectos y muy bonitos de cara a la galería, pero que ya no encajan y eso genera un desajuste en la masticación y dolores en la articulación»
Florencio Páez, Jefe de Servicio de Odontología del Hospital HM Nou Delfos-HM Dental Center
Páez pone ejemplos concretos. El del típico paciente con ruido en una articulación que no asocia que eso le ocurre tras haberse puesto una ortodoncia. «Él o ella se ve los dientes perfectamente alineados y bonitos, y no se da cuenta de que encajaban mejor cuando estaban descolocados. Pueden ser dientes rectos y muy bonitos de cara a la galería, pero que ya no encajan y eso genera un desajuste en la masticación y dolores en la articulación», apunta el jefe de Servicio de Odontología del Hospital HM Nou Delfos.
«Es fundamental que todo tratamiento de ortodoncia esté supervisado por un profesional cualificado»
Jesús Fernández, societat Catalana d’Odontologia i Estomatologia
Se desconoce el porcentaje exacto de pacientes aquejados por estos problemas debido a una ortondoncia. «Es difícil de cuantificar porque la gente no lo asocia», insiste Páez. Hay gente que incluso va a un fisioterapeuta a tratárselo. Otros, quienes sufren de acúfenos, van al otorrino. Los que tienen migrañas, al neurólogo. «Los que vemos los odontólogos son pacientes que ya han hecho todo el circuito de médicos», dice.
Detrás de muchas migrañas y acúfenos hay, en realidad, «problemas de masticación». Un 90% de los pacientes con migraña «no tienen un problema en el cerebro». Y precisa también que, aunque el (mal) uso de las ortodoncias está detrás de muchos de estos problemas, la causa principal es que las mandíbulas de las personas «son cada vez más pequeñas» porque las dietas son «cada vez menos exigentes», lo que genera una falta de espacio en la boca.
«Estas empresas negocian muy bien con las entidades financieras. Te hacen un márketing de 100 euros al mes en ortodoncias que cuestan entre 4.000 y 5.000 euros»
Florencio Páez, lefe de Servicio de Odontología del Hospital HM Nou Delfos-HM Dental Center
Los planes de financiación de estas ortodoncias también contribuyen a su auge. «Todos los centros te financian la ortodoncia. Estas empresas negocian muy bien con las entidades financieras. Te hacen un márketing de 100 euros al mes en ortodoncias que cuestan entre 4.000 y 5.000 euros. Antes no se podía», apunta Páez. Muchos de estos adultos, añade, son personas que en su adolescencia no se pudieron costear un tratamiento de este tipo. Y, además, hay otro factor que empuja al ‘boom’ de las ortodoncias: la presión estética de la sociedad. «La gente cada vez quiere verse más guapa. Hay más adultos que van al gimnasio, a centros de estética…».
Más conciencia sobre la salud bucal
Para Jesús Fernández Sánchez, director del Posgrado en Ortodoncia de la Societat Catalana d’Odontologia i Estomatologia (SCOE), el aumento de la ortodoncia en adultos de los últimos años tiene que ver, también, con la «mayor conciencia sobre la salud bucal», los «avances tecnológicos» en ortodoncia («los tratamientos han mejorado significativamente con opciones más estéticas y discretas», precisa), la «motivación estética», la «mayor accesibilidad económica» y la «prevención a largo plazo». «Corregir un apiñamiento dentario no solo mejora la estética, sino que previene problemas futuros periodontales -pérdida ósea y movilidad dentaria-, lo que refuerza la motivación para evitar de forma preventiva estos futuros problemas con ortodoncia», explica.
Fernández cita otros dos factores que han favorecido este ‘boom’: por un lado, el «cambio cultural», pues ha disminuido el «estigma» asociado al uso de la ortodoncia, y por otro, la «influencia de las redes sociales». «La constante exposición a imágenes de sonrisas perfectas ha aumentado la preocupación por la estética dental», dice Fernández. Explica que, en los últimos cinco años, el uso de ortodoncia en adultos «se ha triplicado», lo que refleja un «verdadero auge» en el sector.
«La mayor conciencia sobre la salud bucodental, el cambio cultural y las redes sociales han alentado el ‘boom'»
Jesús Fernández, societat Catalana d’Odontologia i Estomatologia
Como su colega Páez, insiste en que «es fundamental que todo tratamiento de ortodoncia esté supervisado por un profesional cualificado» y alerta de los riesgos de usar la ortodoncia sin supervisión. Sus consecuencias son «el desgaste dental y los problemas en la oclusión», la «recesión gingival y la pérdida ósea y los problemas periodentales» («el movimiento no controlado de los dientes puede dañar las encías y provocar la pérdida de hueso alveolar, aumentando el riesgo de perder dientes», apunta) y los «problemas periodentales» (según Fernández, «un mal control del tratamiento puede llevar a la acumulación de placa y sarro», lo cual incrementa «el riesgo de enfermedades como la periodontitis»).
Tipos de ortodoncia que usan los adultos
Según Fernández, los pacientes después de la adolescencia prefieren tratamientos ortodóncicos discretos y estéticos. Por eso hay tres tipos principales de ortodoncia:
•Ortodoncia invisible. Son los alineadores transparentes, que son «muy populares por su comodidad y discreción».
•’Brackets’ estéticos. Están fabricados con materiales como porcelana o zafiro y son menos visibles que los ‘brackets’ metálicos tradicionales.
•Ortodoncia lingual. Es otro tipo de técnica de aparatología fija donde los ‘brackets’ son colocados en la parte interna de los dientes, lo que los hace «completamente invisibles» desde el exterior, aunque puede requerir una «mayor adaptación inicial».
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