Al menos 6 personas fueron asesinadas y otras 91 resultaron heridas por los bombardeos sin precedentes realizados por Israel este viernes contra los suburbios del sur de Beirut y cuyo presunto objetivo era el líder del grupo chií Hizbulá, Hasán Nasrala.
El Ministerio de Salud Pública libanés dijo en un comunicado que «los sucesivos bombardeos del enemigo israelí en Haret Hreik, en los suburbios sur de Beirut, provocaron, en un balance preliminar, el martirio de seis personas y heridas a otras 91, incluidas 14 que tuvieron que ser hospitalizadas». Asimismo, indicó de que los trabajos de retirada de escombros continúan a esta hora de la madrugada, pese a que los ataques aéreos se produjeron sobre las 18:30 hora local (15:30 GMT).
El Ejército israelí dijo que los bombardeos fueron dirigidos contra la sede de Hizbulá, que presuntamente estaba ubicado debajo de unos edificios en el Dahye, mientras que medios israelíes informaron que, según fuentes militares bajo condición de anonimato, el objetivo era Nasrala. Hasta el momento, la formación armada no se ha pronunciado sobre el estado de su líder.
La Agencia Nacional de Noticias del Líbano (ANN) dijo que los bombardeos provocaron una «gran destrucción» y el derrumbe de varios inmuebles residenciales del Dahye, como se conocen a estos suburbios sur de Beirut y donde también se vinieron abajo algunos edificios. Fuertes explosiones resonaron por toda la capital y poblaciones adyacentes, y enormes columnas de humo se pudieron ver elevándose desde la zona a grandes distancias, algo que no había ocurrido con ninguno de los siete bombardeos perpetrados contra la zona desde el inicio de las agresiones.
Este es el séptimo ataque contra la zona desde el inicio del fuego cruzado entre las partes el 8 de octubre de 2023 y el quinto en tan solo una semana.