Ángel Cristo se ha convertido en uno de los personajes revelación en la prensa del corazón durante el último año. A pesar de ser famoso desde la cuna, el hijo de Bárbara Rey ha sido en realidad un auténtico desconocido para la audiencia hasta que decidió dar el gran salto mediático y cargar contra su madre en Telecinco, en varias entregas del programa ‘¡De viernes!’. Sus intervenciones sirvieron para conocer que había sido padre de una niña en 2017, que con la madre de la pequeña la relación no era buena y que actualmente tenía una relación con Ana Herminia, que pronto también adquirió protagonismo en televisión.

Para sorpresa general, el joven puso a su madre contra las cuerdas, contando que durante años le había tenido sometido (dijo sentirse casi como un criado a su servicio), que no tenía vida personal porque tenía que atenderla y que estar siempre disponible para cualquier necesidad que tuviera, como darle masajes en los pies. 

De estas mediáticas entrevistas llegó el plato fuerte: su participación en ‘Supervivientes’, donde se enfrentó a prácticamente todos sus compañeros y acabó expulsado de manera disciplinaria por huir isla a través y saltarse los perímetros de seguridad. A su llegada a España, vendrían nuevas entrevistas y duras revelaciones sobre su madre y su hermana. 

En contra del camino seguido por su hermana Sofía, que durante años concedió numerosas entrevistas en los programas risas y participó en diferentes realities, Ángel vivió a la sombra de los focos durante sus 43 años de vida. Vivió durante varios años en el extranjero y comenzó a estudiar comunicación audiovisual y producción musical. Tan solo se había dejado ver en algunos estrenos y eventos familiares, cuyas imágenes son las que los programas televisivos emiten en bucle cuando ahora se habla de él. También hizo una entrevista en ‘¿Dónde estás corazón?’ con Jaime Cantizano. 

Su gesto triste mostraba el auténtico calvario que vivió en su casa durante su infancia y adolescencia, con los malos tratos que sufría su madre por parte de su padre y de los que fueron testigos tanto él como su hermana. Tras la separación del matrimonio, terminaron unos problemas pero llegaron otros

Bárbara Rey retomó su relación intermitente del pasado con el Rey Juan Carlos I y, según el propio testimonio de su hijo, le utilizó para que hiciera fotografías de uno de sus encuentros íntimos en su casa, con el fin de utilizar ese material para obtener dinero y contratos en televisión. 

Ahora, esas fotos que el gobierno retiró en los años 90 han visto la luz esta semana en la prensa holandesa. El propio Ángel Cristo las ha vendido a cara descubierta y esta noche se sentará de nuevo en ‘¡De viernes!’ para contar todos los detalles de esta operación y si habrá más entregas en las próximas semanas. 

Fuente