En enero de 2024 se anunció que se había sometido a una operación abdominal, en marzo que padecía cáncer y más recientemente que había terminado su tratamiento de quimioterapia. La recuperación ha sido lenta pero satisfactoria, así que ya falta menos para que retome su agenda oficial. Kate Middleton prepara su reaparición en un evento que es muy especial para ella, en el que ya está trabajando desde su residencia.

La recuperación de la futura reina de Inglaterra va lenta pero con paso firme. Lleva meses trabajando desde casa mientras prepara una reaparición que. además, está hecha a su medida, pues será muy controlada, muy cuidada y además televisada en Inglaterra. La propia Princesa de Gales comunicaba el pasado 9 de septiembre que esperaba «volver a trabajar y asumir algunos compromisos públicos más en los próximos meses cuando pueda».

Ahora ya conocemos que ha mantenido varias reuniones en Windsor con el fin de avanzar todos los detalles del que será un día importante para ella y para todos los seguidores reales que han estado apoyándola durante todos estos meses y deseándole una satisfactoria recuperación. Será en diciembre cuando reaparezca junto a toda su familia.


Kate, en el concierto de Navidad del año pasado con sus hijos.

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Por cuarto año consecutivo, Kate presidirá el tradicional concierto de villancicos Together At Christmas en la Abadía de Westminster, que tiene un marcado carácter solidario. En 2023, por ejemplo, estuvo dedicado a la importancia del desarrollo y cuidado de los niños en la primera infancia. Para ello, invitó a «personas y familias inspiradoras de todos los rincones del Reino Unido, incluidas parteras, visitadores sanitarios, profesionales de la primera infancia, maestras de guardería y voluntarios de la comunidad».

El concierto suele tener lugar en los primeros días del mes de diciembre y es televisado el día 24 en la cadena ITV. Volveremos a ver a la Princesa tocando el piano como ha hecho en las ocasiones anteriores, seguramente acompañada de algún invitado estelar. Este evento se ha convertido en tradición para Nochebuena en los hogares de los británicos, con un gran seguimiento de audiencia.

Desde que comunicó su enfermedad, son contadas las veces que ha aparecido en público. La primera, en el desfile Trooping the Colour en junio y luego en Wimbledon, en julio. Se ha protegido al máximo su intimidad durante la recuperación y, pese a los distintos comunicados, en ningún momento se ha precisado el tipo de cáncer que ha padecido. Lo que sí ha dejado claro es que ha pasado por un periodo «aterrador e impredecible» y que su objetivo sigue siendo mantenerse libre de esta enfermedad.

En el proceso, el apoyo de su marido y de sus hijos ha sido importante. «Este momento nos ha recordado, sobre todo, a Guillermo y a mí, que debemos reflexionar y estar agradecidos por las cosas sencillas pero importantes de la vida, que muchos de nosotros a menudo damos por sentado: simplemente amar y ser amados», ha dicho.

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