Pyongyang critica los ejercicios de Seúl y Washington, y advierte de una «guerra termonuclear»
El Gobierno japonés ha indicado este martes que las autoridades norcoreanas le han avisado de que tiene la intención de lanzar de nuevo satélite en los próximos días, lo que se entiende como un nuevo intento tras el fallido de hace unos meses.
El primer ministro nipón, Fumio Kishida, ha dado órdenes para que se analice el plan y pueda coordinar con Estados Unidos y Corea del Sur acciones para instar a Pyongyang a evitar el lanzamiento, según informa la agencia de noticias Kyodo.
Así, Kishida ha remarcado que Tokio considera que este lanzamiento es equivalente al disparo de un misil balístico, de tal forma que viola las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU.
«GUERRA TERMONUCLEAR»
La notificación se ha producido después de que los líderes de Japón, Estados Unidos y Corea del Sur acordaran el viernes pasado durante una cumbre trilateral cerca de Washington impulsar la cooperación para oponerse al rápido desarrollo de capacidades nucleares y de misiles norcoreanos.
«Si los acuerdos alcanzados en Camp David se aplican además en el actual ejercicio que involucra los recursos humanos y materiales de las fuerzas hostiles e incluso de las fuerzas satélite, la posibilidad de que estalle una guerra termonuclear en la península de Corea podría convertirse en realidad», reza un acuerdo de la agencia de noticias KCNA.
En este contexto, además, se han iniciado los ejercicios militares más importantes en años entre Seúl y Washington, por lo que las tensiones en la región están escalando hasta el punto de que Pyongyang ha mencionado la posibilidad de una guerra termonuclear.
«Es más que probable que se produzca una guerra termonuclear, la primera de la historia, en la península de Corea. EEUU y los títeres de Corea del Sur han iniciado el 21 de agosto el ejercicio militar (…) a pesar de nuestras repetidas advertencias», continúa el texto de KCNA.
Es por ello que las autoridades norcoreanas han denunciado que Estados Unidos «no solo» ha movilizado el equipo y las Fuerzas Armadas desplegadas en el área, sino también fuerzas aéreas.
El Servicio Nacional de Inteligencia de Corea del Sur ha indicado que existe una alta probabilidad de que estos «preparativos» impliquen una nueva prueba balística en plenos ensayos conjuntos sin descartar siquiera que el proyectil sea un misil balístico intercontinental.
A pesar de ello, Seúl y Washington han decidido seguir adelante con los ejercicios «Escudo de la Libertad Ulchi», específicamente concebidos para una guerra contra Corea del Norte. Ambos ejércitos planean así más de 30 simulacros de campo y campañas simuladas de ataques informáticos con la participación de todas las ramas militares.