La ola de calor que en estos momentos atraviesa la Península Ibérica ha llegado, en principio, a su punto máximo durante la jornada de este sábado. Según apuntan los registros de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), durante el día de hoy hay más de 70 municipios españoles que han registrado máximas por encima de los 40 grados centígrados. La cifra más alta del día se ha alcanzado en la localidad de Almadén, en Ciudad Real, donde se ha llegado a los 43,5 grados. En las ciudades jienenses de Andújar y Bailén se ha llegado a los 42,8 y 42,5 grados respectivamente y en Montoro, Córdoba, se han registrado hasta 42.2. En Catalunya, la cifra más alta del día ha recaído en el municipio de Seròs (Segrià) donde se han alcanzado los 40,8 grados.
En estos momentos, prácticamente todo el territorio peninsular español está envuelto en una gran ola de calor y está viviendo con unas temperaturas muy encima de lo normal incluso para la época. En algunos puntos se están registrando cifras hasta 16 grados por encima de lo habitual para estas fechas. La zona más afectada por este fenómeno es la de Andalucía, Extremadura y Castilla y León, donde este sábado se han superado de largo los 42 grados y en algunos puntos incluso se han rozado los 44. También destaca el caso de las localidades cercanas a los grandes valles de los ríos españoles como el Ebro, el Guadalquivir, el Duero, el Tajo y el Guadiana. En la estación meteorológica de La Femosa, en Lleida, se han superado los 40,7 grados y en Alfarràs se ha llegado a los 40,6.
Alerta roja
La subida de los termómetros empezó este viernes y, según los pronósticos, se alargará hasta como mínimo este domingo. Durante este tiempo, las autoridades han activado alertas de nivel amarillo, naranja y rojo en prácticamente todo el territorio español. En las próximas horas se activará una alerta roja (peligro extremo) en la zona del cantábrico, incluido Euskadi, ante la previsión de que los termómetros alcancen los 40. También se mantendrá activada una alerta naranja en provincia de Lleida.
La situación podría empezar a mejorar a partir del lunes. Para entonces se espera que la llegada de una gran masa de aire atlántica por el tercio occidental que provoque un lento descenso de los termómetros. Los modelos se muestran aún inciertos sobre qué pasará a partir de entonces. Por ahora, todo apunta a que a partir del martes ya no estaremos oficialmente en ola de calor pero, aún así, las temperaturas seguirán estando por muy por encima de lo normal para la época. En lo que llevamos de verano, España ha registrado casi una ola de calor por semana. Durante estos episodios se han batido récords históricos como, por ejemplo, el registrado por el Observatori Fabra de Barcelona el pasado 30 de julio cuando por primera vez en la historia de la ciudad se registraron máximas de 40 grados.