Después de un desfile rompedor de los atletas en barcos que surcaron el Sena y que se vio muy deslucido por la intensa lluvia, tan solo faltaba por conocer quiénes serían los últimos relevistas de la antorcha olímpica y ahí el Comité Organizador tenía guardada una última sorpresa agradable para el deporte español.
El mito del fútbol francés de origen argelino Zinedine Zidane entregó la antorcha a Rafa Nadal en Trocadero, quien la llevo a una gran lancha en la que compartió viaje con otros tres iconos del deporte mundial. ¡Qué gran detalle de Francia de honrar al 14 veces ganador del torneo de Ronald Garros! Sin duda, el balear no olvidará nunca estos Juegos pese a la intensa lluvia y a que este sábado a las 19.00 horas debutará en el torneo de dobles junto a Carlos Alcaraz.
Los acompañantes del mejor tenista español de la historia son también emblemáticos: el estadounidense Carl Lewis (ganó cuatro oros en atletismo en los Juegos de Los Ángeles 1984), la rumana Nadia Comaneci (logró el primer ‘diez’ de la historia de la gimnasia artística en Montreal 1976) y la estadounidense Serena Williams, una de las mejores tenistas de todos los tiempos.
Nadal disfrutó el momento pese al aguacero que cobraba aún mayor virulencia por la velocidad de la embarcación y en ocasiones bromeó con Carl Lewis, el mítico ‘Hijo del Viento’. A medida que el trayecto se acercaba a su final crecía la emoción y se alimentaba aún más la incógnita para desvelar la identidad del último relevista.
La extenista gala Amelie Mauresmo y su compatriota el exbaloncestista Tony Parker fueron de los primeros que iniciaron esa última serie de relevos con la intervención de tres atletas paralímpicos (entre ellos Alexis Hanquinquant) hasta que por fin tomaron la antorcha dos emblemas del deporte francés. Se trata de Teddy Riner y de Marie-José Perec.
Nacido en Pointe-à-Pitre, el judoca guadalupense de 35 años busca en estos Juegos su cuarto oro consecutivo en judo. Riner perdió uno de sus dos únicos combates olímpicos en Pekín 2008 ante el brasileño Schlittler para colgarse el bronce en más de 100 kilos venciendo al georgiano Gujejiani. Después, fue oro en esa misma categoría en Londres 2012 y en Río 2016.
En Tokio perdió en cuartos frente al ruso Tamerlan Bashaev, pero se rehízo y logró el bronce contra el nipón Hisayoshi Harasawa. Además, ganó el oro con el equipo mixto de Francia y ahora quiere seguir haciendo historia en París.
Por su parte, Perec es un emblema del atletismo con su zancada larguísima que la llevó a colgarse el oro en 400 lisos en los Juegos de Barcelona y a revalidarlo cuatro años después en Atlanta en un más difícil todavía que la llevó a reinar también en el doble hectómetro.
La francesa ya había tenido un papel importante en el relevo de la antorcha al participar en la llamada ‘Ocean Torch Relay’ que llevó el fuego a los Territorios Franceses de Ultramar incluyendo Guadalupe, de donde procede la exatleta.