La Casa Blanca afirmó este jueves que el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, no es un «criminal de guerra», sino un «amigo» de Estados Unidos.
John Kirby, uno de los portavoces de la Casa Blanca, hizo estas declaraciones en una rueda de prensa mientras Netanyahu se reunía en el Despacho Oval con el presidente estadounidense, Joe Biden.
«No le consideramos un criminal de guerra, es un aliado, socio y amigo. No consideramos que las conclusiones de la Corte Penal Internacional sean apropiadas o relevantes», manifestó Kirby.
En mayo, el fiscal de la Corte Penal Internacional (CPI), Karim Khan, solicitó al tribunal la emisión de órdenes de arresto contra Netanyahu; su ministro de Defensa, Yoav Gallant, y varios líderes del grupo islamista palestino Hamás por presuntos crímenes de guerra y de lesa humanidad en la guerra en Gaza.
Ni Estados Unidos ni Israel han aceptado la jurisdicción de la CPI, con sede en La Haya (Países Bajos) y creada con la misión de juzgar a individuos acusados de cometer crímenes de guerra, crímenes de lesa humanidad y genocidio.