Cata y Yago pensaron que la novia de un famoso futbolista sería la víctima perfecta de su primer timo. Como no consiguieron el Cristo que ella tanto quería para decorar su casa, la experta en arte intentó que el cuadro de la Virgen Dolorosa que había conseguido Yago captase su atención.
Cata finge que habla con una gran estrella de la música por teléfono para hacerle creer a su víctima que están muy interesadas en el cuadro. ¡Y consigue llamar su atención! Sin embargo, de un momento a otro la pierde de vista y piensa que el plan ha fracasado.
Cuando todo parecía perdido, la novia del futbolista la sorprende en la calle diciéndole que quiere comprar la virgen. Ella piensa que Rosalía también está interesada en el cuadro y le ofrece un 10% más. ¡La víctima ha mordido el anzuelo!