El conductor del autobús que este martes sufrió un impactante accidente y quedó empotrado casi en vertical a la entrada de un túnel de la C-32, a la altura de Tordera, ha declarado ante los Mossos d’Esquadra, según informa la agencia EFE, que sufrió «un episodio de sueño» mientras conducía, tal como avanzó este diario. La investigación del caso trata ahora de corroborar esta hipótesis con el testimonio de los pasajeros y otras pruebas clave, como la trayectoria de la frenada del vehículo o el estado de la vía.
El chófer, un hombre de cerca de 45 años y con unos ocho años de antigüedad en la empresa, ha sido dado de alta precisamente este miércoles. Según los primeros indicios, el vehículo, en el que viajaban una cincuentena de trabajadores de la compañía Inditex que eran trasladados de Barcelona a la planta de Tordera, había pasado todas las revisiones. El autocar quedó volcado con una inclinación de unos 45 grados y apoyado en la boca de un túnel. Las primeras hipótesis ya apuntaban a la posibilidad de que el chófer se había quedado dormido al volante. Según fuentes policiales, el conductor dio negativo en la prueba de alcohol y drogas.
Parte médico
Según el último balance de heridos del Departament de Salut, en estos momentos aún hay cuatro personas ingresadas en estado grave, una más que ayer.
De hecho, una mujer de 28 años que se encuentra ingresada en el Hospital Vall d’Hebron de Barcelona sufre una lesión medular grave. También hay un hombre de 40 años en el Hospital Germans Trias de Badalona, en Barcelona, y una mujer de 40 años y un hombre de 28 que están hospitalizados en el Josep Trueta de Girona. Este último paciente fue ingresado inicialmente este martes en el Hospital de Blanes como un herido leve, pero, tras someterse a pruebas diagnósticas, ha pasado a considerarse que está en estado grave.