El Ayuntamiento de Manacor ha alertado a los residentes y hoteles sobre los riesgos de tocar y alimentar a los gatos callejeros debido a los casos de tiña detectados en Cala Mendia.
En un esfuerzo por evitar la propagación de la enfermedad, ya se están realizando pruebas a las colonias felinas y el consistorio anuncia que sustituirán los comederos y camas de la zona.
El pasado 11 de julio, el Ayuntamiento fue notificado de un posible caso de zoonosis (tiña) en una agrupación de gatos en Cala Mendia.
Según el regidor de Medio Ambiente, Sebastià Llodrà, de momento «solo se tiene constancia de un caso, posiblemente resultado de contacto estrecho con uno de estos gatos».
«Inmediatamente, se informó al Servicio de Salud Ambiental de la Dirección General de Salud Pública y Consumo del Govern para recibir orientación sobre las medidas a tomar», explica.
«Además, CEPAD, la empresa contratada por el consistorio para la recogida y asistencia de animales domésticos, realizó las pruebas médicas pertinentes a uno de los gatos afectados y está a la espera de los resultados», agrega.
Recomendaciones
El Ayuntamiento aconseja no alimentar ni tocar a los animales callejeros. La proliferación de gatos en las calles también es consecuencia del abandono de estos animales. «Lo deseable sería que quienes quieran adoptar un gato se dirijan a los centros de acogida autorizados. Recordamos también que los animales domésticos deben estar esterilizados y llevar chip», insiste Llodrà.
En Cala Mendia, donde los gatos se cuentan por centenares y solo en la avenida Alfonso XII ya hay hasta tres colonias, el Ayuntamiento tiene previsto sustituir los comederos y camas de estos animales para evitar posibles nuevos contagios y desinfectar las zonas de paso y las más frecuentadas por estos felinos.
El consistorio de Manacor recuerda que la Ley de Bienestar Animal establece que las agrupaciones de gatos deben estar controladas por la administración con la colaboración ciudadana, con el objetivo de mantener una población de gatos sana y equilibrada con el entorno.
El Ayuntamiento ha mantenido diversas reuniones con colectivos y personas que cuidan de las colonias de gatos repartidas por el municipio para asegurar normas higiénicas y de control claras. Actualmente, no se sabe con certeza cuántas colonias existen en Manacor debido a su constante aumento. Llodrà señala que ninguna está autorizada en términos de salubridad según los técnicos.
El Ayuntamiento está en proceso de redactar un nuevo reglamento de bienestar animal para establecer un mapa más preciso de las colonias y definir los derechos y deberes, con el objetivo de reducir el número de ejemplares callejeros.
Manacor lleva años trabajando con el método CER (Captura-Esterilización-Retorno) para reducir el número de individuos sin recurrir al sacrificio como método de control. «Este requiere la colaboración indispensable de las personas y entidades cuidadoras de gatos», indica.