Sílvia Orriols, la líder del partido ultra Aliança Catalana, aseguró la primera vez que accedió a la tribuna del Parlament que el resto de los partidos ya podían repartirse los cargos que quisieran, porque ella tiene lo que quería: un altavoz desde el que llegar a más catalanes. Aunque no se puede decir que le haya ido mal hasta ahora. La también alcaldesa de Ripoll es una auténtica celebridad en las redes sociales catalanas, que utiliza con fruición para atacar a los partidos sistémicos. Con especial querencia por ERC.
Tampoco se escapan de su crítica los actuales inquilinos de la Generalitat, a los que ha vuelto a atizar, verbalmente, en la red X por su campaña de promoción de la Diada del 11 de Septiembre. Una campaña que no se verá en Ripoll, porque su alcaldesa ha advertido al Govern que necesita «cero lonas» para promocionar la fiesta nacional catalana en los términos en los que la defiende el ejecutivo de Pere Aragonès.
El Govern ha ofrecido a los ayuntamientos catalanes banderolas de la campaña de promoción que anualmente se lanza con motivo de la Diada. El año pasado el eje de la campaña era la defensa del catalán, en un momento en que esta lengua era «atacada» por los nuevos gobiernos de PP y Vox en la Comunidad Valenciana y Baleares, en opinión del Govern. «Una lengua, muchos acentos» era el lema de la campaña.
Diversidad e inmigración
No se ha presentado todavía la campaña de 2024, pero a tenor de lo avanzado por Orriols, no es ajena al debate sobre la inmigración que centra la actualidad política española. Según la líder de AC, la banderolas ofrecidas expresarán «el orgullo de pertenecer a un país que se fortalece con la diversidad y rechaza frontalmente el fascismo«. Un mensaje que contrasta con el reciente rechazo de la Generalitat al reparto de menores inmigrantes.
El Ayuntamiento de Ripoll «necesita 0 lonas» de esta índole, ha respondido Orriols. La líder de AC, que se define como independentista e islamófoba, argumenta su rechazo porque «la Diada no debe servir para guerras ideológicas«. Tampoco para «promover la multiculturalidad que nos residualiza».
Por contra, advierte, la Diada debe servir para «reivindicar con orgullo nuestra identidad nacional». «No necesitamos un govern que banaliza el fascismo y frivoliza con el sufrimiento de millones de personas» concluye la misiva de Orriols a la Generalitat, convenientemente publicitada en redes. Un mensaje recibido con entusiasmo por sus seguidores, con el que sigue alimentando una promoción que según algunas proyecciones podría llevarla a multiplicar su representación en el Parlament en caso de repetición electoral en Cataluña.
