El PP fue el primero en registrar el pasado lunes su lista de comparecientes para la comisión de investigación del ‘caso Koldo’ en el Senado. Los conservadores tienen mayoría absoluta para aprobar los nombres que quieran ver desfilar por la Cámara Alta y pueden decidir el calendario. Ni Pedro Sánchez ni su mujer, Begoña Gómez, figuran por ahora en ese listado. Sí están algunos empresarios con los que los conservadores buscan estrechar el cerco sobre la esposa del presidente que tienen relación con el rescate de Air Europa y la intermediación de la compañía con el Ministerio de Transportes.
El PSOE hizo público ayer el suyo para la comisión registrada en el Congreso de los Diputados, y que amplía al resto de administraciones la investigación sobre los contratos de mascarillas durante la pandemia. Y como era previsible incluyó a Isabel Díaz Ayuso. Pero no a su pareja, Alberto González, investigado por fraude fiscal; ni tampoco a Alberto Núñez Feijóo. A las preguntas sobre si hay algún pacto de no agresión para evitar llamar a los dos líderes nacionales y a familiares de dirigentes a esas comisiones, ambas partes se muestran tajantes. «No, rotundamente no» respondió el propio Pedro Sánchez desde Oslo (Noruega), donde ha comenzado una gira para recabar apoyos en su iniciativa de reconocer ya al Estado palestino. El presidente del Gobierno no quiso dejar lugar a dudas.
Tampoco la secretaria general del PP, Cuca Gamarra, que compareció este viernes desde la sede nacional del PP y que respondió a la misma pregunta que “no hay ningún tipo de acuerdo”.
Gamarra se quejó, además, de que el listado de comparecientes registrado por los socialistas es “un show”. El PSOE, que también ha llamado a declarar a Salvador Illa y Francina Armengol, pone la lupa sobre el Ayuntamiento de Madrid. Por eso citarán a Elena Collado, la jefa de compras del consistorio madrileño y testigo en el caso del cobro de comisiones por la venta de material sanitario, y a los empresarios Alberto Luceño y Luis Medina, investigados por esa presunta estafa al Ayuntamiento, además de al propio alcalde José Luis Martínez-Almeida. Los socialistas dejaron fuera, eso sí, a José Luis Ábalos, a pesar de que en su Ministerio habría empezado la trama que se conoce como ‘caso Koldo’.
La secretaria general del PP aseguró que la comisión en el Senado puesta en marcha por su partido es “una investigación seria, que además está siendo investigada en sede judicial”, que afecta “a ministerios socialistas, dirigentes socialistas y al propio Partido Socialista”, mientras que la del Congreso responde a “todo lo que sea ocultar y tapar este caso del PSOE”.
“Ni más, ni menos”, reiteró la número dos del PP, acusando al partido de Sánchez de “estar poniendo el ventilador” contra la formación conservadora, “sus familiares”, “pidiendo datos personales” y “cruzando líneas rojas” como es, a su juicio, “los derechos fundamentales de un particular que no forma parte de ningún procedimiento judicial ni de investigaciones en el Congreso y Senado”, en clara alusión a la pareja de la presidenta de la Comunidad de Madrid. No se refirió, sin embargo, a la apreciación del letrado de la comisión de investigación en el Senado, que también advirtió al PP que se había excedido al hacer algunos llamamientos (como los empresarios a los que quiere interrogar por su supuesta relación profesional con Begoña Gómez), porque no se corresponden con el objeto que pretende estudiar la comisión sobre la trama Koldo.