«Estamos ante un momento histórico en que la fuerza del independentismo, la aritmétrica, puede permitir amplios réditos para Cataluña», ha aseverado este martes la portavoz del Govern catalán, Patrícia Plaja. Y es que, una vez digeridos los batacazos electorales de las elecciones generales, que redundó en una pérdida de 600.000 votos por parte del independentismo, va creciendo en su campo la sensación de que se está ante una oportunidad sinpar. Ya lo dijo a primera hora el ‘president’ en una entrevista a Catalunya Ràdio: «Es Sánchez el que necesita los votos, ya conoce nuestras condiciones». Plaja remató el clavo animando al propio presidente del Gobierno en funciones «a perder el miedo y mover ficha», precisamente, para atender estas peticiones, que no son otras que una ley de amnistía y avanzar en el derecho a decidir».
Coincidencia en el objetivo
Tras la tierra de por medio puesta por Aragonès con respecto a la ANC, Plaja quiso poner un poco de arnica a las relaciones con la entidad soberanista y afirmó que «lo importante es que coincidimos en el objetivo final, que no es otro que la independencia». Eso sí, como el ‘president’ descartó la DUI por «ineficaz» a no ser que cuente cojn un reconocimeinto internacional que, a vuelapluma, no parece que cuente la causa catalana o, al menos, no estuvo ni medianamente cerca de obtenerlo en 2017.
Plaja, que en todo momento sumó los votos de los dos partidos independentistas, también recordó a los posnvergentes , sin citarlos, que la amnistía no era más que un paso más, la evolución lógica de un proceso de negocación iniciado en 2019. Una negociación que ha contado, en todos sus pasos, solo con la presencia de ERC.
La portavoz también ha querido mantener ese equilibrio que trata de ponewr Aragonès a su gestión entre las cuestiones del ‘procés’ y el llamado día a día. Y lo ha hecho para reivindicar, de nuevo, el traspaso a la Generalitat de «las vías y las catenarias del servivio de Rodalies de Barcelona a la Generalitat,»