Informe mecanografiado: «¿Ataca al Dogma? no. ¿A la Iglesia? no. ¿A sus Ministros? no. ¿Al Régimen y a sus instituciones? no. ¿A la moral? sí [marcado dentro de un círculo rojo]». Al lado, 21 páginas anotadas por contener «una serie de descripciones excesivamente gráficas» [subrayado en rojo]. Debajo, con fecha 7 de agosto de 1950, la conclusión del censor del régimen franquista desautorizando la publicación de ‘1984’ de George Orwell en España, con un texto donde detalla que «se trata de una parodia bastante pintoresca y lograda, cuya publicación podría autorizarse en principio, ya que su tendencia es anticomunista, si la acción no girase alrededor del tema del ‘crimen sexual’ cometido por un hombre y una mujer». El ‘crimen’ que activó la tijera censora era la relación carnal clandestina y fuera del matrimonio entre Winston Smith y Julia, la pareja protagonista de una de las novelas más influyentes del siglo XX, advertencia distópica con mayúsculas contra los totalitarismos de toda condición.