Todo el mundo en pie. Todo el mundo aplaudiendo. Miles y miles de aficionados gritando su nombre. Toda la parrilla de MotoGP mostrándole pleitesía, empezando por su excompañero en el equipo Repsol Honda, Marc Márquez, ocho veces campeón del mundo. El mismo campeón ‘Pecco’ Bagnaia, líder de Ducati. Todos los jefes de equipo boquiabiertos al verle en el top-5 en todos los entrenamientos y cuarto ¡cuarto! en la carrera del sábado y en la del domingo, en una parrilla repleta de campeones del mundo como él (posee un título de 125cc y dos de 250cc) y con todas, todas, las motos oficiales de Honda, Yamaha, Ducati, Aprilia y KTM.
Si, claro, estoy escribiendo de Dani Pedrosa, que, el próximo 29 de septiembre, cumplirá 38 años y este fin de semana ha protagonizado una de las mayores exhibiciones (ni es broma, ni es exagerado) que deportista alguno puede protagonizar en su especialidad, la que sea, a lo largo de toda su historia. La historia de Pedrosa es impresionante: 298 grandes premios, 54 victorias, 153 podios (por poco logra el 154 ayer en Misano) y 49 ‘poles positions’.
Marc, maravillado
“Este fin de semana he disfrutado muchísimo cuando veía a Dani (Pedrosa) en pista y ya ni te cuento cuando lograba engancharme a él y hacer dos o tres vueltas detrás suyo”, explica Márquez. “Es un espectáculo ir detrás suyo. Es el más fino de todos nosotros. Un placer seguirle. Bueno, ya ni te digo si, como me pasó a mí, logras meterte en la Q2 gracias a engancharte a él y lograr un tiempazo para como está nuestra moto. Insisto, una delicia verle entre nosotros. Me recordó el año de mi debut (2013) en MotoGP y le seguía para aprender lo antes posibles. Y, sí, aquel año gané mi primer título de MotoGP, en parte, a sus enseñanzas”.
«Es un espectáculo ir detrás suyo. Es el más fino de todos nosotros»
“Tú lo ves y dices: no hay otro como él, imposible”, explicó ayer Bagnaia nada más bajarse del podio de Misano. “La historia de Dani lo dice todo. Es impresionante seguirle en la pista. Va fino, fino, fino, por el sitio, como si llevase la moto por raíles. Su estilo es el más bello de todos. En una palabra: es perfecto”.
¿Se puede pedir algo más? No. Y Pedrosa ni se inmuta. Tampoco cuando le dicen que el hombre que lo descubrió, Alberto Puig, ahora Team Manager del equipo Repsol Honda, dice que “no sé por qué se retiro tan pronto”. “Dejemos ese tema, las cosas van como van y están bien así”, señala Pedrosa, que ya hizo una exhibición parecida en su regreso en Jerez, aclamado por 90.000 ‘motars’.
«Es bonito volver y competir y rendir bien, pero no es algo que echo mucho de menos”, insistió cuando le dijeron por qué no se planteaba volver o aceptar más invitaciones de los organizadores o de su propia marca, KTM. “No, no, deja, deja, ya está bien así. ¿Sabes lo que ha sido lo mejor de este fin de semana?, ¡que ya se ha terminado!”, dijo partiéndose de risa. Es más, este fin de semana, Pedrosa vuelven a su otro entretenimiento, los coches de KTM, con una carrera en Valencia.
“No sabría ponerme una nota, pero estoy bastante contento con el rendimiento. Al equipo si le pongo una nota muy alta, han trabajado bien y sin errores», siguió contando a El Periódico. ¿Volver?, ¡ni hablar!, insistió. “Además”, dijo entre risas, “ya veis el lio que tenemos, con cinco pilotos para cuatro motos el año que viene. Deja, deja, no”.
«¿Pedrosa?, su historial lo dice todo. Es un placer verle pilotar. Es, simplemente, perfecto»
Pedrosa insistió que tanto en Jerez como en Misano se lo ha pasado en grande. “El domingo estuvo algo más nervioso que el sábado. Es más, el sábado, en la carrera corta, me vi con posibilidades de superar a ‘Pecco’ (Bagnaia) en las últimas vueltas, pero no fue posibles. Insisto, me lo he pasado muy bien, pero cada cosa tiene su época y yo ya tuve la mía, de la que estoy muy orgulloso”.
Repito, sí, sí, 39 años, ya los tiene, y sigue siendo un ejemplo, un maestro y, sobre todo, un pionero, el líder, el dueño, de un estilo único de pilotar veloz, limpio, impecable, eficaz. Único, genial. Como dice Bagnaia, el actual campeón del mundo y líder del Mundial de MotoGP, “su historia le define”.