La capacidad de superación del valencianismo no tiene límites. Según los organizadores, Libertad VCF, la manifestación de ayer por la supervivencia del Valencia rebasó las más de 20 000 personas marchando hacia Mestalla desde las inmediaciones del Consistorio con un objetivo primordial: llamar a la acción a los políticos del Ayuntamiento y la Generalitat para que Peter Lim salga del accionariado del club.
El 2M pasará a la historia por ser -al menos, hasta la fecha- la más numerosa que se recuerda contra Meriton Holdings. Pese a la mejor trayectoria del equipo, en comparación con la pasada temporada, en la que estuvo coqueteando con el descenso hasta el último día, la cifra de presentes exigiendo que el máximo accionista «se vaya de una vez» prueba que el hartazgo de la afición hace mucho que ha superado los topes y no hay esperanza de recuperación con el asiático al frente.
Las más de 20 000 personas reunidas por la salida de Lim solo tienen comparación con el número similar de valencianistas en la Avenida de Suècia mientras se vació el estadio en los primeros 19 minutos del Valencia-Celta del 21 de mayo de 2022, una jornada en la que la impactante imagen contra el empresario singapurense dio la vuelta al mundo. Ni el caminar más tranquilo del conjunto de Baraja hace desfallecer a los fieles blanquinegros.
La marcha recorrió los puntos estratégicos que pueden marcar el futuro de Meriton: El Ayuntamiento -esquina de la calle de las Barcas- la sede de CaixaBank en Pintor Sorolla, donde se pidieron «soluciones porque el Valencia se muere», y el coloso de Mestalla. Cánticos como «Layhoon Chan, mentirosa» y «Peter, no, Valencia, sí» y una creativa multitud de pancartas marcaron una marcha cívica que pobló las calles céntricas sin registrarse ningún tipo de incidente. Un desfile de valencianismo, por ejemplo, bastante más numeroso que el vivido el 18 de marzo de 2019 con 8 000 personas celebrando el Centenario del club, o los que congregaron a cerca de 15 000 en las concentraciones anteriores en 2023.
La manifestación masiva arrancó a las cinco de la tarde con un manifiesto leído por Javier Santos y Eva Sánchez, miembros de base de Libertad VCF. En el mismo, la organización fijó como «único cometido» de la protesta «el de defender a nuestro club, el de preservar la supervivencia de nuestro VCF». «Estamos aquí para exigir a las Administraciones que cumplan con su palabra, que sean fieles a aquellas declaraciones que todos escuchamos durante la campaña electoral. Que nos libren de esta lacra llamada Meriton», se leía en un texto que pide socorro a la clase política: «Ayuden a su gente a librarse de su opresor y demuéstrennos de qué lado están, si CON SU PUEBLO O CON SU OPRESOR».
SUPER tuvo acceso a la pancarta que encabeza la protesta: «Vuestra traición, nuestra sentencia. 1919-2030». Miguel Ángel Corona, director deportivo, Javier Solís, director corporativo, Tebas, presidente de LaLiga, Jorge Mendes, el agente con vía libre en el VCF también tuvieron mensajes en contra. Y se repitió la petición a los gobiernos municipal y autonómico para no brindarle a Lim derechos urbanísticos. Asimismo, algunas pancartas dejaron clara la preferencia por un Valencia CF bien gestionado antes que por ser sede del Mundial 2030: «‘No més estafes mundials. No més Lim. Només per l’afició, només pel VCF’». También frente a la censura de Meriton: «Ni con expedientes nos podrán callar».
Políticos como Juanma Badenas (Vox), que tuvo cerca una pancarta a su favor – «¡Resiste! Alcalde del VCF», y los socialistas Borja Sanjuán y Javier Mateo asistieron a una marcha histórica y multitudinaria.