Un Valencia – Real Madrid ha sido siempre sinónimo de partido intenso en el campo y en la grada. Pero el duelo de este sábado (21.00 horas) concentra una atención mediática mayor por el regreso de Vinicius Jr. a Mestalla nueve meses después de los incidentes racistas que se produjeron en el partido de Liga. Pero este sábado también se producirá la enésima protesta contra Peter Lim, propietario de un club que en la previa al enfrentamiento ha expulsado a 15 aficionados por «cánticos violentos» en los que, según su argumentación, se deseaba la muerte del singapurense.
«Vamos a aprovechar el tirón mediático. No somos tontos. Sabemos lo que supone un partido contra el Real Madrid y más con estos antecedentes. Va a estar toda la prensa internacional por lo que pasó el año pasado, que a nosotros nos da un poco igual. Evidentemente, no nos pareció bien el trato informativo por una generalización que se produce en todos los aspectos de la vida. Entonces pensamos en aprovechar el tirón mediático. Por eso hacemos la manifestación. Es marketing«.
Lema de la manifestación: ‘2014-2024: la infamia se repite’
En Libertad VLC lo tienen claro, tal y como comenta en conversación con El Periódico de España, del Grupo Prensa Ibérica, David Núñez, vicepresidente de una plataforma que busca «la libertad y democratización» del Valencia CF. Es la convocante de una manifestación contra el máximo accionista del club. Saldrá este sábado, a las 17:00 horas, y que terminará en Mestalla. La asociación ha promocionado la concentración con una furgoneta en la que se podía leer ‘2014-2024. La infamia se repite. Manifiéstate por la defensa de nuestro escudo’, en referencia a la fecha de venta del club. Por el otro lado, el habitual lema ‘Lim, go home’ (Lim, vete a casa).
«El lema de ‘La infamia se repite’ tiene una connotación política. En 2014, las acciones que obraban en un ente controlado por las administraciones públicas, se vendieron a Peter Lim sin ningún tipo de garantía. Cero cláusulas como, por ejemplo, construir un estadio. Ahora se pretende dar un pelotazo urbanístico con el Nou Mestalla mediante una recalificación. Se le va a dar algo a un señor que ya te engañó en su día», critica Núñez.
El miembro de Libertad VLC recuerda cómo en el documento de la venta de acciones se incluyó el término inglés ‘procure’ a la hora de la responsabilidad que tenía Meriton con el club. Pero del ‘procure’ a la nada ha habido un camino estrecho como evidencia la reciente negativa por parte del Valencia a firmar el documento que exige la Real Federación Española de Fútbol para acoger el Mundial 2030. Esto hace tambalear la candidatura de la ciudad mientras el Nou Mestalla, iniciado en 2007, sigue siendo un fantasma de hormigón.
La última bala contra Lim es la cuestión urbanística
«Lo que se plantea es un nuevo estadio de mínimos. Un proyecto de recortes que básicamente supone una capa de pintura con los elementos de seguridad obligatorios. Nada espectacular, como un campo de finales del siglo XX, sin tecnología. Lo que nosotros pretendemos es un proyecto para la gente», reivindican desde Libertad VLC.
Esta semana Miguel Zorío, exvicepresidente del Valencia, y opositor a Lim, ofrecía a María José Catalán, alcaldesa de la ciudad, un proyecto y un plan de financiación para poder acabar el estadio. Aseguraba que no dependería de las fichas urbanísticas y «Peter Lim no pegaría el pelotazo del viejo Mestalla» a la vez que el club «podría terminar el nuevo en tres años». Desde el sector crítico a Meriton ven en la presión contra este aprovechamiento inmobiliario una de las últimas balas a su favor.
«Si se le cierra esta puerta, quizás acceda a negociar. Si lo consigue, será más difícil forzarle a irse», añade Núñez. Por tanto, en la manifestación del sábado se mezclan temas económicos, políticos y sociales. Al final, son cuestiones que se entrelazan. La mala gestión ha afectado al club y aumentado su dependencia de agentes externos como Jorge Mendes. Sin embargo, este año ha encontrado un motivo para la esperanza con una combinación que no puede ser más de la casa: Rubén Baraja, mito che; y una camada de Paterna -la cantera valencianista- que está dando la talla (Fran Pérez, Diego López, Javi Guerra, Jesús Vázquez…).
Mestalla se tambalea como sede del Mundial 2030
Esto permite a los aficionados asumir la difícil disociación entre lo que pasa en el campo y en el palco. «La asociación nace precisamente para no perder el vínculo que te crea la desafección. El Valencia ya no te representa como institución. Es como si la hubieran secuestrado, por lo que solo queda empujar para que se larguen y la última bala es el tema urbanístico, importante, porque implica a la política», incide el vicepresidente de Libertad VLC, quien considera que el actual Mestalla podría ser sede del Mundial perfectamente, «pero hay negocios sospechosos detrás».
Para la afición che, el sábado es una jornada de autoafirmación y defensa de sus valores. «El valencianismo es un sentimiento que bebe de una tradición familiar muy fuerte. Algo tan cultural como las fallas y que se construye sobre el sentimiento de ser valenciano. Va más allá de la ciudad. De hecho, el 50% de los seguidores del club son de la provincia», explica Núñez. Aprovechar el efecto mediático que genera el regreso de Vinicius sirve además para golpear en el talón de Aquiles de Peter Lim, porque el daño reputación internacional influye directamente en sus negocios.
De ahí que la crisis que generaron los insultos racistas al jugador brasileño, con repercusión en todo el planeta, fue uno de los episodios más complicados para una marca que en Valencia está completamente defenestrada. De ahí el veto a la productora Conspiraçao que está realizando el documental de Vinicius para Netflix. Pero, ¿cómo afronta la masa social del club volver a estar en el foco por un tema que extendió una sombra xenófoba por todo Mestalla?
Hugo Duro: «Vinicius verá que esos imbéciles no representan a nadie»
«Hay una parte de enfado, porque se considera que se fue injusto con la generalización. Todo el mundo reconoce que hay racistas y violentos. Pero eso pasa, por desgracia, en todos los campos de España y del mundo, donde hay grupos ultras. Se manipuló claramente al acusar a toda la afición de llamarle ‘mono’ cuando se dijo ‘tonto’ -lo hizo Ancelotti, pero después rectificó-. Esto le ha pasado a Vinicius en más campos. Es un jugador que se encara con la grada y que al Valencia le deseó el descenso», esgrime el vicepresidente de Libertad VLC.
Por tanto, en un partido con una carga ambiental tan grande, el desarrollo del mismo marcará lo que suceda. A pesar de que en la previa se haya producido la expulsión de aficionados del Valencia por «violencia verbal» contra Lim. O se haya detenido al individuo que profirió insultos racistas a una menor por llevar una camiseta de Vinicius en el Metropolitano. Diferentes jugadores también han sido contundentes. «Si la atención se va fuera del césped, quiero que sea para los bomberos y toda la gente que ayudó en el incendio de Campanar», pidió Diego López.
Mientras que Hugo Duro, quien sufrió la agresión de Vinicius que le costó una roja -después se la retirarían- fue muy contundente: «Tengo ganas de que llegue el sábado para que Vinicius vea que lo que demostraron esos tres o cinco imbéciles, porque no tienen otro nombre, obviamente no representa al valencianismo ni a Valencia ni a la sociedad ni a nadie». Pero como recuerda David Núñez, de Libertad VLC, con realismo, «cuando se caliente el partido a alguno se le irá la boca, aunque el camino nunca puede pasar por calificativos racistas». Todos los focos puestos en Mestalla y el valencianismo, quienes juegan varios partidos a la vez que no pueden perder.