El Fraikin BM Granollers selló su clasificación para la ronda principal de la Liga Europea con una sufrida victoria ante el CS Minaur Baia Mare rumano por un tanto: 29-28.
GRA
29
28
MIN
Alineaciones
| (14+15): Krivokapic, Deumal (4), Reguart (3), Fischer (-), Franco (6, 2p), Palomino (1) y Urdangarin (7) -siete inicial-; Panitti (ps), Espigulé (-), Fis (5), Figueras (3), Povill (-) y Armengol (-). |
| (18+10): Terekhov, Nagy (2), Botea (7), Kotrc (4), Kozakevych (4), Pop (5) y Da Silva (4) -siete inicial-; Sincu (ps), Pavlov (2, 2p), Cumpanici (-), Vujic (-), Fotache (-) y Zeinelabedin (-). |
Al conjunto de Antonio Rama le valía el empate –si Aarhus ganaba su partido- y la victoria, pero fue casi todo el partido a remolque de un Baia Mare que jugó con mucha intensidad defensiva y con mucho acierto en ataque, sobretodo durante la primera mitad.
Los de Nuno Miguel De Melo se fueron al descanso con cuatro tantos de ventaja que no fueron suficientes ante un Fraikin BM Granollers que tiró de épica y de ilusión para remontar, pasito a pasito. La victoria final desató la euforia en el Palau d’Esports de Granollers.
El intercambio de dianas inicial se rompió enseguida. Tras el empate a dos, conseguido por Bruno Reguart, una pérdida de balón de los catalanes, buscando conectar con Adrià Figueras en la posición de pivote, permitió a Baia Mare escaparse de dos goles (2-4).
Poco después, una doble intervención del cancerbero ucraniano del Baia Mare Anton Terekhov permitió a los rumanos colocarse con tres de ventaja (3-6), con Erik Pop y Tudor Botea como estiletes desde la larga distancia.
Antonio Rama pidió tiempo cumplido el minuto 9 pero Baia Mare siguió haciendo mucho daño desde el perímetro. La defensa vallesana no supo parar a los lanzadores rumanos, básicamente Pop y Tudor, y tampoco fue el día de los porteros. Ni Luka Krivokapic primero, ni Pau Panitti después, pudieron parar al ataque rumano, que consiguió llegar a una máxima diferencia de seis goles (9-15).
Alguna recuperación con contragolpe y tres tantos seguidos de Pablo Urdangarin fueron lo más destacado de un Fraikin BM Granollers que cometió demasiadas imprecisiones en ataque y que no supo cómo parar al ataque rumano durante unos primeros 30 minutos que acabaron con el Baia Mare liderando el marcador por cuatro tantos (14-18).
El Fraikin tuvo un último ataque para dejar la diferencia en tres pero Terekhov rozó lo mínimo un lanzamiento de contragolpe de Marcos Fis para desbaratarlo.
Aunque la empresa era complicada, quedaba toda la segunda mitad para obrar la remontada. Baia Mare empezó con un Cristian Sincu –suplió a Terekhov bajo palos- muy enchufado, con tres paradas casi consecutivas y parecía que con el 14-19 y el 15-20 la cosa no mejoraba, pero los de Rama reaccionaron con un parcial de 4-0 y se pusieron a un solo tanto (19-20).
La situación pintaba mejor –el empate también le servía a los vallesanos en el caso que Aarhus se impusiera en Ljubliana, como así pasó (30-37)- pero aún quedaban golpes por superar.
Otro parcial de 4-0, con dos contragolpes seguidos culminados por Jordi Deumal y Sergi Franco pusieron el empate a 24 antes de que Deumal fuera expulsado con roja directa en una jugada confusa sobre Anderson Da Silva (minuto 49).
El 24-25 conseguido por el pivote Robert Nagy fue la última ventaja de un Baia Mare que vio como el Fraikin se ponía por delante por primera vez con el 26-25, obra de Bruno Reguart. En esos minutos finales, entre nervios de los rumanos, que veían esfumar sus aspiraciones, apareció Panitti bajo palos.
Los de Rama se escaparon con tres tantos (29-26) pero Baia Mare se puso a un tanto (29-28) y con ataque para empatar pero la rodilla de Panitti apareció para atajar un lanzamiento de Kotrc desde la esquina a ocho segundos del final. Sin tiempo para más, el júbilo se desató en la pista para celebrar la clasificación.
La primera victoria en casa en esta fase de grupos –los otros dos partidos terminaron con derrota- fue clave para una clasificación para la Main Round, que enfrentará al Fraikin BM Granollers con los dos primeros clasificados del grupo D, el Porto portugués –Pol Valera regresará a su casa- y el Elverum noruego.













