La portera del Barcelona y de la Selección Española, Cata Coll, se ha sincerado en una entrevista en la víspera de la final de la Liga de Naciones contra Alemania. La guardameta se muestra con confianza, pero cauta, y considera que la final está al cincuenta por ciento, recordando la igualdad que ya se vio en las semifinales de la pasada Eurocopa.
Coll admite que el formato de final a doble partido no es su preferido, pero el equipo está adaptado. Sobre el rival, destaca la superioridad técnica de España: «Creo que nosotras con balón somos superiores». Reconoce, sin embargo, la fortaleza física y la velocidad de las alemanas, un punto que considera que deben vigilar de cerca para evitar sus peligrosas contras.
La portera mallorquina espera tener «mucho trabajo» en la eliminatoria, pero asegura que son los partidos que le gusta jugar. Además, no teme una posible tanda de penaltis en el Metropolitano para decidir el título: «Acepto, tenemos opción de ganar». Sobre su habilidad en esta suerte, afirma: «no se me da mal porque es algo que me gusta. Creo que el portero no tenía que tener miedo en los penaltis porque no tenía que perder».
En la concentración reina un «muy buen ambiente», con una «combinación perfecta» de juventud y veteranía. Cata Coll, que se define como «más antimadridista» que culé, aclara que tiene una excelente relación con sus compañeras del Real Madrid en la selección, como Athenea del Castillo o Eva Navarro, aunque la rivalidad se vive «a muerte» en un Clásico.
Respecto a la controversia con la portera inglesa Hannah Hampton, quien la acusó de quitarle una botella con apuntes en una tanda de penaltis, Coll niega la mayor: «odio que mientan, no entiendo por qué lo hizo». Asegura estar «muy tranquila» y zanja la polémica afirmando que se paró dos penaltis en aquella tanda.
Sobre la reciente reaparición mediática de Luis Rubiales por la publicación de su libro, la guardameta es tajante y asegura que ni siquiera sabía que lo había publicado. «Es un tema que ya literalmente me da igual. Creo que hay que avanzar y no quedarse en el pasado», ha sentenciado, confirmando que es un asunto del que no se habla en la concentración.
A sus 24 años, y tras un año de vértigo en el que pasó de ser suplente a campeona del mundo y titular indiscutible en el Barça y la Selección, Cata Coll cree que todavía tiene margen de mejora. «No creo que esté en mi ‘prime’, estoy en camino de eso», afirma con humildad, consciente de que debe aprovechar cada oportunidad.
La entrevista finaliza con una sorprendente confesión: no le gusta ver fútbol. «Me aburre ver fútbol, no me gusta. Prefiero estar en un bar con colegas viéndolo o ponerme una serie tranquila en casa», admite la portera titular de la Selección Española, a quien, eso sí, le «encanta jugarlo».














