Las bolsas de Asia-Pacífico han registrado avances generalizados este jueves, en una sesión marcada por los nuevos máximos históricos alcanzados por los índices de referencia de India y por el buen tono heredado de Wall Street, que encadena ya cuatro jornadas consecutivas en positivo gracias al rebote tecnológico y al incremento de las expectativas de un recorte de tipos de la Reserva Federal (Fed) en diciembre.
El Nifty 50 indio tocó los 26.284 puntos, mientras que el BSE Sensex subió hasta los 86.026 puntos, niveles nunca vistos desde los récords alcanzados por ambos indicadores en septiembre de 2024.
En Japón, el Nikkei 225 avanza un 1,23%, apoyado en el buen comportamiento de los valores tecnológicos. El Topix se anota un 0,64%. Entre las compañías más destacadas figuraran Advantest, que llegó a rebotar un 5%; SoftBank, con subidas superiores al 5%; y Tokyo Electron, que se anotó alrededor de un 2%.
El buen tono se extendió también a Corea del Sur, donde el Kospi repunta un 1,05% y el Kosdaq suma un 0,39%. El Banco de Corea decidió mantener sin cambios su tipo de interés de referencia en el 2,5% por cuarta reunión consecutiva, en un contexto de debilitamiento del won y presión sobre el mercado inmobiliario. La moneda surcoreana cotiza en mínimos frente al dólar no vistos desde abril.
En Australia, el S&P/ASX 200 avanza un 0,42%, mientras que en China, el Hang Seng de Hong Kong está plano, al igual que el CSI 300.
En el plano macroeconómico, los datos publicados este jueves por Pekín mostraron que los beneficios industriales del país cayeron un 5,5% interanual en octubre, su mayor descenso desde junio, y revirtieron la tendencia de recuperación de los dos meses anteriores. En los diez primeros meses del año, las ganancias del sector avanzaron un 1,9%, lejos del 3,2% acumulado hasta septiembre.
El optimismo en Asia llegó tras otra sesión alcista en Wall Street. Los principales índices estadounidenses cerraron este miércoles con avances: el Dow Jones sumó un 0,67%, el S&P 500 ganó un 0,69% y el Nasdaq Composite se revalorizó un 0,82%. Los inversores descuentan ya una probabilidad del 85% de que la Reserva Federal recorte los tipos un cuarto de punto en diciembre, frente al 30% de hace solo una semana.













