Risas, buenos momentos, premios, música y emociones han sido los ingredientes principales de la primera Gala del Baloncesto Balear organizada por la Fundación FEBIB 1935 con la colaboración de la Federació de Bàsquet de les Illes Balears. Cerca de 200 personas llenaron el Convention Center del Hipotels Playa de Palma Palace para vivir en primera persona este evento tan especial.
Durante casi dos horas de gala se vivieron momentos muy emotivos, pero el más especial y el que generó más aplausos fue la entrega del Premio Extraordinario ‘Germans Reynés’ a Emma Aparicio, una joven que ha tenido que luchar contra un cáncer y que, aun así, nunca ha dejado de lado el baloncesto. Después de superar la enfermedad, continúa vinculada al deporte de la canasta como oficial de mesa. Pero este no fue el único gran momento de la noche.
La presencia de Alba Torrens, galardonada como mejor jugadora balear del año, o el instante de inaugurar el Salón de la Fama del baloncesto balear con el Premio Leyenda a diez personas que han dejado huella en nuestro baloncesto y al club decano de las Islas Baleares, el Joventut Mariana, también fueron momentos destacados de una velada de unión y sentimiento.
Fue un acto a la altura de la importancia que tiene el baloncesto en la sociedad balear y una noche que todos los que forman parte de este deporte merecían. El presidente de la FBIB, Juanjo Talens, cerró el acto dejando claro que «ya estamos trabajando para la Gala del Baloncesto Balear 2026».
Tras un acto lleno de sensaciones en el que más de uno se emocionó, tocaba despedir una gran noche con la música del grupo mallorquín ‘The Bowins’ y un ‘finger food’ para que todas estas estrellas pudieran compartir un rato más distendido con la sonrisa del reconocimiento que acababan de recibir a su trayectoria.









