Julia está desesperada ante la falta de ayuda desde que ha tenido a su bebé. Como Patricia ya está embarazada de verdad, ha decidido prescindir de la mexicana, quien se ha quedado sin hogar, sin dinero, y con un bebé en brazos que tiene que cuidar y mantener.
La joven decide recurrir a Carmen, quien siempre fue un apoyo para ella cuando estaba en la mansión Oramas. La madre de Sara se muestra muy contenta de ver a Julia sana y salva y con su bebé, al que ha decidido llamarle David.
Julia se presenta ante ella para pedirle un gran favor: que se quede, por un tiempo, con el pequeño David. “No puede pasar la noche en la calle”, le dice la joven, ya que el bebé acaba de salir de la incubadora y todavía no está todo lo bien que debería estar.
Carmen, con el corazón en un puño, no puede dejar que esa pequeña criatura sufra, y decide quedarse con David mientras la joven busca un trabajo y un hogar. “Las cosas no se hacen así”, le avisa Carmen. ¿Encontrará Julia alguna solución para hacerse cargo de su bebé?









