El Burgos Club de Fútbol tiene un hincha más sobre el campo. Se llama David González, es burgalés, canterano y está cumpliendo el sueño de triunfar en el equipo de su vida. Con un bagaje de 4 goles y 4 asistencias en 13 partidos entre liga y copa, el centrocampista se ha convertido en una de las grandes revelaciones de la temporada. El futbolista ha visitado los estudios de COPE, y en ‘Deportes COPE en Burgos‘ con Dani Blánquez, ha repasado su espectacular momento de forma, asegurando que se siente «muy feliz por cómo se está dando este año» y «agradecido por la confianza».
El duro camino de David González hasta convertirse en pieza clave del Burgos CF: «Recuerdo a mis padres irse llorando de vuelta a casa»
Pese a su crecimiento exponencial en el último año, David González tiene claro que el secreto de su éxito no es ninguna fórmula mágica, sino la constancia. «Creo que en sí, en mí, no ha cambiado nada«, ha afirmado con rotundidad. El jugador atribuye su éxito actual a los valores que le inculcaron desde niño: «Soy un chico muy trabajador, muy humilde desde pequeño, que es lo que me han inculcado desde siempre mis padres, y creo que el trabajo al final siempre acaba dando sus frutos«, ha sentenciado.
El duro camino de David González hasta convertirse en pieza clave del Burgos CF: «Recuerdo a mis padres irse llorando de vuelta a casa»
La humildad como bandera
Esa filosofía de vida se refleja en su día a día. El canterano ha confesado que sigue viviendo con sus padres, algo que considera una gran ventaja. «El poder vivir con ellos también es una comodidad para mí«, admite, ya que le permite llegar de entrenar y tenerlo todo preparado. Eso sí, sigue un estricto plan en sus comidas: «Les hago como un menú cada semana y, más o menos, me tienen preparado cada día lo que les mando». Aunque echa de menos algunos caprichos: «Lo que más me gusta de mis padres son las croquetas de mi madre, pero claro, eso no se puede comer todos los días».
Mis hábitos, mi día a día es lo mismo, es trabajar, es cuidarme lo máximo que pueda»
Futbolista del Burgos CF
El duro camino de David González hasta convertirse en pieza clave del Burgos CF: «Recuerdo a mis padres irse llorando de vuelta a casa»
Su círculo más cercano sigue siendo el de siempre. Sus amigos de toda la vida son socios del Burgos CF y acuden al estadio a animarle, una situación que para él supone un «orgullo tremendo». Lejos de sentir una presión añadida, el futbolista lo describe como «una motivación extra«, porque es como «jugar también por ellos, jugar por tus amigos, jugar por tus padres». Entre risas, también ha reconocido que es de los que más entradas pide en la plantilla, lo que le ha valido alguna broma de sus compañeros.
Un camino de sacrificio
El camino hasta asaltar la élite no ha sido fácil. González ha recordado lo duro que fue dejar su casa con solo 16 años para fichar por el CD Numancia. «Los primeros momentos fueron duros«, ha explicado. «Recuerdo domingos a mis padres, llevarme a las 9 de la noche a Soria… y yo, pues, alguna noche de llorar, de pasarlo mal, y de mis padres irse llorando de vuelta a Burgos«, ha confesado en los micrófonos de la COPE.
Alguna noche de llorar, de pasarlo mal, y de mis padres irse llorando de vuelta a Burgos»
Futbolista del Burgos CF
Tras su paso por Soria, la cantera del Real Madrid y el Castilla, el verano de 2024 surgió la oportunidad de volver a casa. La decisión fue clara: «Teníamos clarísimo que era ya momento de salir de de Madrid y dijimos, qué mejor lugar que venir a Burgos«. El acuerdo fue rápido y sencillo, aunque tuvo que guardar el secreto hasta el último momento, para nerviosismo de sus amigos, que le enviaban los recortes de prensa que ya anunciaban su fichaje.
El duro camino de David González hasta convertirse en pieza clave del Burgos CF: «Recuerdo a mis padres irse llorando de vuelta a casa»
David González valora muy positivamente su paso por la cantera del Real Madrid, donde guarda grandes amigos. Destaca que lo que más se lleva es «saber que eres futbolista las 24 horas».
Protagonista dentro y fuera del campo
Sobre el césped, se ha mostrado muy cómodo en la posición de extremo a pierna cambiada que le ha asignado el técnico Luis Miguel Ramis, ya que le permite moverse por dentro y estar en contacto con el balón. El jugador ha destacado la unión del vestuario en torno a la idea del entrenador: «Si no crees en la idea que te transmite el entrenador, pues, es muy difícil que vaya bien«, ha afirmado.
Esta confianza se traduce en una personalidad arrolladora. En ausencia de Curro Sánchez, ha asumido la responsabilidad de lanzar los penaltis. Preguntado por un hipotético lanzamiento en el minuto 120 de una final por el ascenso, su respuesta fue contundente: «Sin duda«. Y ha añadido: «Estaría convencido que lo iba a meter seguro. Es lo más importante a la hora de ir a tirar un penalti, el estar tú convencido».
De cara al próximo partido, el derbi contra el Mirandés en Mendizorroza, ha reconocido que para los jugadores de la casa como él, Saúl o Mario, siempre supone «un poco más de motivación» por la rivalidad que existe desde pequeños. Una mentalidad ganadora para un jugador que, pese a su explosión, sigue siendo el mismo chico humilde que soñaba con triunfar en El Plantío.
