Al filo del descanso, después de que el Celta empatara por segunda vez, Lamine Yamal puso el 2-3 en el marcador. El Barcelona volvió a parecerse al de la temporada pasada, un equipo que se sentía a gusto y brillaba cuando los partidos se resumían en ser intercambios de golpes. Allí lucía un fútbol frenético gracias que pivotaba sobre su pólvora ofensiva.
Si Lamine llegó a sentir molestias en el pubis durante el partido en Balaídos, apenas se notaron desde fuera. Su compromiso defensivo, además, fue total. En cuanto a números, su gol fue el 40 generado con la camiseta del Barcelona en Liga. Llegó a esta cifra habiendo disputado 81 encuentros. Es decir, aporta un gol, entre tantos y asistencias, cada dos duelos. Si la cifra goleadora se divide en los minutos, la media queda en uno cada 142. Es decir, a cada partido y medio aproximadamente.
Lamine se ha ido convirtiendo en un jugador cada vez más redondo. Llegó a debutar con 15 años gracias a sus golpes de ingenio, un talento natural difícilmente replicable. Y poco a poco fue traduciendo aquella superioridad en la capacidad de ir sumando números. Su primera asistencia fue contra el Villarreal, en la cuarta jornada de la temporada 2023/24. Después vendrían 39 goles generados más. Ha conseguido números casi inalcanzables mientras competía con 16, 17 y 18 años.
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En total, entre todas las competiciones y la selección española en partido oficial, acumula 78 goles generados. Son 13 en 26 encuentros de Champions League, 8 en 6 partidos de Copa del Rey, 3 en 4 de Supercopa de España y 14 en 20 con la Roja. Ahora, convocado por Luis de la Fuente para los duelos ante Georgia y Turquía, podrá seguir ampliando sus cifras.
