«Nunca pensé que hubiera un día en el que no solo habría publicado nueve álbumes, sino poder ver mis canciones en sus ojos y ver que significan tanto para ustedes!», exclamó Craig David durante su espectáculo. La Plaza de la Música se transformó anoche en una gran pista de baile junto al mar de Las Canteras. El cantante subió al escenario pasadas las 23.00 horas y se encontró con un público entregado desde el primer minuto. Antes, varios DJ locales habían preparado el ambiente con mezclas de soul y pop electrónico que permitieron bailar y disfrutar a los más de 4.000 asistentes que acudieron al evento que tuvo lugar en Las Palmas de Gran Canaria.
El artista británico, quien se hizo de rogar por retrasos por parte de la organización, abrió el concierto con Killing me softly with his song y pronto sonaron clásicos como Fill me o Rise & Fall, que provocaron los coros y los móviles en alto de una audiencia que creció con sus canciones.
Regreso del R&B
Craig David, que ya había actuado en Gran Canaria en anteriores giras, regresó con un espectáculo más maduro pero igual de potente. Su última visita fue en 2009, cuando encabezó el concierto del Entierro de la Sardina en el Parque de Santa Catalina. Dieciséis años después, durante el show, Craig recordó con cariño su anterior visita y volvió a la Isla con la misma naturalidad escénica y un repertorio que demuestra que su carrera sigue viva.
A lo largo de más de dos décadas, el cantante de Southampton se ha consolidado como una de las voces más reconocibles del R&B británico. Desde su debut en 2000 con Born to Do It, que vendió más de ocho millones de copias, hasta sus álbumes Following My Intuition (2016), 22 (2022) y el reciente Commitment (2025), ha sabido mantenerse fiel a su estilo mientras se adapta a nuevas tendencias. En todos ellos combina pop, garage y soul.
Cercanía y energía
Entre tema y tema, se dirigió varias veces al público para agradecer el cariño que recibe en España. «Gracias, gracias, infinitas gracias», exclamó con emoción al escuchar al público corear su nombre al unísono. Inmediatamente, comenzó a sonar uno de los temas más reconocidos de la carrera del cantante: Walking away.
Sin artificios y una voz que no pierde fuerza, Craig David volvió a la ciudad con lo mejor del R&B británico. Una actuación directa, cercana y llena de energía que convirtió la noche de Las Palmas de Gran Canaria en una celebración.












