Chery vuelve a mover ficha en el terreno de la electrificación con una propuesta que promete dar que hablar. En el marco del Chery International User Summit 2025, celebrado recientemente, el grupo chino ha presentado una batería de estado sólido de desarrollo propio que promete hasta 1.500 kilómetros de autonomía por carga y un nivel de seguridad que va varios pasos por delante del estándar actual.
La nueva batería, que utiliza materiales sólidos de última generación junto con compuestos avanzados de litio y manganeso, alcanza una densidad energética de 600 Wh/kg, una cifra que, de confirmarse en condiciones reales de producción, la situaría muy por encima de las baterías de iones de litio actuales. Este dato no solo impacta por sí solo, sino por lo que implica: mayor autonomía, menor peso por kilómetro útil y mejores capacidades térmicas y de seguridad.
Chery International User Summit 2025 / Chery
Desde el grupo aseguran que la celda ha sido diseñada no solo para ofrecer cifras récord, sino también para responder ante situaciones críticas. Durante las pruebas internas, el módulo resistió impactos agresivos como perforaciones con clavos o herramientas eléctricas sin generar humo ni llamas, lo que indica un nivel de seguridad muy superior al de las químicas actuales. Y en un contexto donde los incendios en baterías siguen siendo un tema sensible, este tipo de avances cobran especial relevancia.
Hasta 1.500 km por carga
Uno de los datos más llamativos de esta nueva batería es su autonomía: entre 1.300 y 1.500 kilómetros en condiciones ideales, lo que prácticamente dobla el rango medio actual de los coches eléctricos convencionales. Esta cifra, siempre que se mantenga en vehículos de producción, cambiaría por completo la percepción de los coches eléctricos, eliminando de raíz el llamado «miedo a la autonomía» que todavía frena a muchos usuarios. Desde Chery no se han dado detalles aún sobre qué modelos incorporarán primero esta tecnología, pero sí se ha confirmado que el lanzamiento comercial está previsto para 2027.

Chery no ha desvelado todavía en qué modelos se montará primero esta batería / Chery
Detrás de esta batería no hay un acuerdo con terceros, ya que la batería ha sido diseñada internamente por el Instituto de Investigación del grupo. Esta independencia tecnológica le permite a Chery tener un mayor control sobre la evolución del producto y sobre su escalabilidad, tanto en volumen como en coste. La clave está en haber apostado por una estructura química propia, combinando materiales sólidos con una nueva generación de electrolitos, lo que mejora no solo la estabilidad térmica, sino también la velocidad de carga, un aspecto que el grupo también quiere mejorar en próximas fases de desarrollo.
Aunque el desembarco comercial de la batería de estado sólido de Chery aún tardará un par de años, la presentación oficial de esta batería supone ya un cambio de juego. Por un lado, sirve como aviso a la industria: la carrera por la electrificación no se gana solo con más modelos, sino con tecnología disruptiva. Y por otro, contribuye a reforzar la imagen de Chery como actor relevante en el nuevo mapa de la automoción global.














