EIDF ha presentado sus resultados correspondientes al primer semestre de 2025, en un ejercicio marcado por el proceso de reconstrucción del grupo, y ha mostrado unas pérdidas netas de 12 millones de euros.
La compañía ha registrado un EBITDA negativo de 3,4 millones y ventas por 18,6 millones, aunque destaca que «ha alcanzado un hito clave en su proceso de transformación empresarial con la obtención de su primer informe de auditoría sin salvedades tras varios ejercicios consecutivos».
» Este resultado representa un punto de inflexión en la trayectoria de la compañía y evidencia el impacto positivo de las medidas implementadas por el Consejo de Administración desde 2024. Entre ellas destacan los cambios en la composición del propio Consejo y la creación de un área corporativa que ha fortalecido los mecanismos de control interno, la transparencia y el cumplimiento normativo, consolidando así una cultura de buen gobierno que permea en todas las áreas de la organización. Con este avance, EIDF reafirma su compromiso con los estándares más exigentes de gestión empresarial», destaca la empresa.
Durante 2024, la firma llevó a cabo una profunda revisión contable que «afloró ajustes de ejercicios anteriores, y en 2025 la incorporación de nuevos responsables de las áreas de Autoconsumo y Generación han derivado en una revisión exhaustiva del pipeline de proyectos, con el objetivo de evaluar su viabilidad técnica, económica y estratégica».
Esta revisión, explica, «ha permitido identificar y depurar iniciativas heredadas de ejercicios anteriores que, tras un análisis riguroso, se han considerado no viables».
«La consecuencia directa de este ejercicio de transparencia y responsabilidad ha sido el reconocimiento contable de pérdidas asociadas a dichos proyectos, reflejando el compromiso de la compañía con una gestión prudente y alineada con los intereses de sus accionistas y del mercado«, añade.















