Juana Rivas ha centrado este jueves su declaración como investigada por un posible delito de sustracción internacional de menores en tratar de demostrar que el menor de sus hijos sufre malos tratos del padre, el italiano Francesco Arcuri.
Durante alrededor de una hora, Rivas ha contestado exclusivamente a preguntas de su letrado, el abogado Carlos Aránguez, quien a la salida del Juzgado de Instrucción 4 de Granada ha explicado a preguntas de los periodistas que la defensa se ha centrado en los posibles malos tratos al menor.
Rivas se ha pronunciado también ante los periodistas para pedir que «se acabe el circo» y escuchen a su hijo, que ahora tiene once años y vive en Italia con el padre, quien tiene la custodia.
Aránguez ha explicado que la titular de Instrucción 4 encargada de la causa ha pedido que no ofrezcan detalles de la causa, en la que ha presentado informes de hospitales, imágenes de lesiones y otra documentación vinculada a esos malos tratos por los que se celebra una causa independiente contra Arcuri en Italia.
Por otro lado, el letrado del italiano, Enrique Zambrano, ha incidido en que la causa juzga la sustracción de menores que vulneró el derecho de custodia del padre y no otros delitos.










