España o Francia. A partir de este miércoles (16:30 horas / RTVE) solo una de ellas seguirá escribiendo su nombre en el Mundial sub-17. La Rojita llega lanzada al envite de los octavos de final, con pleno de victorias en la fase de grupos y sin encajar ningún gol —única selección que ha logrado mantener la portería a cero en los tres partidos—. Peor lo ha pasado la selección francesa, que venció con dificultades a la debutante Samoa (4-2), se aseguró la clasificación frente a Nigeria (1-0) y cayó contra Canadá (2-1).
El combinado español, dirigido por Mila Martínez, está un paso más cerca de volver a tocar el cielo, como hicieran en 2018 y 2022 cuando se erigieron campeonas de mundo. La exigencia es máxima: España ha llegado a la final del torneo en las últimas cuatro ediciones y el listón vuelve a estar muy alto. Esa presión, sin embargo, no intimida al grupo: «Iremos paso a paso, partido a partido. Nos vemos con mucha confianza para seguir progresando y alcanzar lo que todos queremos, que es el objetivo: esa gran final«, aseguró Carolina Ferrera, defensa de La Rojita.
El camino de La Rojita
“Al final somos España y siempre nos ponen como favoritas, pero tenemos que demostrarlo en el campo,nadie nos va a regalar nada”, comentó tajante Claudia Barrios en una entrevista para el Diario de Burgos, antes del estreno de La Rojita en el Mundial. Y vaya si lo han demostrado: anotaron cuatro tantos frente a Colombia y endosaron una manita de goles a la República de Corea.
Carlota Chacón, delantera de la Real Sociedad, destacó en ambos partidos, ya que marcó un doblete en cada uno —con cuatro dianas es la segunda máxima goleadora del torneo, por detrás de la italiana Giulia Gilli (5)—. Y en el último partido de la fase de grupos, el testigo del protagonismo lo tomó Barrios, la nueva perla del Atlético de Madrid y autora de los dos tantos frente a Costa de Marfil, que acabó el partido con nueve jugadoras.
Carlota Chacón, nombrada mejor jugadora del partido ante Colombia y República de Corea / RFEF
Pero no solo hay motivos para celebrar en la faceta ofensiva. También en la defensiva, ya que España es la única selección del torneo que no ha encajado ningún gol. En los dos primeros enfrentamientos, la levantinista Anna Álvarez estuvo bajo palos y frente a Costa de Marfil —ya con el billete a octavos asegurado— Alba Fuertes tuvo la oportunidad de disputar sus primeros minutos. A pesar de haber tenido poco trabajo —entre ambas apenas han realizado tres intervenciones—, su seguridad en portería refleja el buen hacer del bloque. Gran parte del mérito también recae en la zaga, que apenas ha concedido ocasiones. Tan correctas en área propia como en rival, porque Julia Torres e Iraia Fernández son dos de las goleadoras de España en esta cita mundialista.














