El volante del coche es una pieza esencial. Al final, es el mando con el que el conductor dirije el vehículo y el que está siempre en contacto con él.
Y como un elemento más del coche, no se libra de problemas. Uno de ellos, quizás entre los más molestos, son las vibraciones.
Hay diferentes motivos por los que el volante del coche puede vibrar y pueden ser más o menos graves. No obstante, da igual la importancia de la causa detrás de las vibraciones del volante: hay que revisar siempre cuál puede ser el problema para evitar averías más graves e incluso accidentes de tráfico.
El RACE recopila cuáles son los principales motivos por los que vibra el volante de un coche.
Por esto vibra el volante
El primero es que los neumáticos no estén bien equilibrados, algo que sucede también por diferentes causas, como que se haya estropeado uno de los plomos o contrapesos. Se nota especialmente a velocidades por encima de los 80 kilómetros por hora y de manera discontinua.
El segundo, también relacionado con los neumáticos, es que estos presenten un desgaste desigual. Detrás de este motivo hay varias causas: defectos de fabricación, llevar mal la presión, dejar el coche parado mucho tiempo… Este tipo de vibración del volante, al contrario que en el caso anterior, se nota especialmente a bajas velocidades.
El tercer motivo ya deja de tener que ver con los neumáticos y pasa a la dirección y es que está mal alineada. Además de por la vibración del volante, esto se nota cuando al soltarlo el coche se va demasiado hacia un lado.
Problemas en los frenos
También puede pasar que el volante del coche vibre si hay un problema en los frenos. Por ejemplo, que los discos estén deformados o alabeados, que haya habido un sobrecalentamiento en una frenada o porque haya algún elemento externo que, durante el rodamiento, se haya introducido entre el disco y la pinza de freno. Por ejemplo, un trozo de asfalto.
El RACE también señala otras causas que provocan vibraciones el volante y, pese a que son menos comunes, no hay que descartarlas. Por ejemplo, que los silentblocks o los amortiguadores estén en mal estado o haya rodamientos defectuosos.















