“Esa noche, lo que yo creo que pasa…”. Con la voz quebrada, rota, Isabel Movilla, madre de Caroline, traza la posible ruta que hizo su hija la noche que desapareció. Sin interrupciones, con dureza y tras diez años preguntándose qué pasó, la mujer dibuja hasta donde es capaz aquella fatídica noche, la última, en el segundo episodio del ‘caso Caroline’ que aborda En Paradero desconocido, el nuevo pódcast de este medio y Prensa Ibérica.
«Creo que llegaron a Sabadell, que estuvieron ahí haciendo el tonto», arranca, “y que mi hija se montó en ese famoso coche rojo. En el sumario se ve, además, que la geolocalización del teléfono de Carol va muy rápido de una antena a otra, demasiado para ir andando. Entonces… Pues se supone que va en coche”.
Nada interrumpe, Isabel continúa: “Además, su teléfono se apaga en la carretera que te lleva a Francia”, afirma contundente Isabel. “Estaba todo planeado para vender a mi hija y sacarla del país”. Respira, coge aire y, durante unos segundos, guarda silencio.
“Está claro que ahí estaba todo pactado”, completa Ana, tía de Carol. “Estaba más que hablado lo que se iba a hacer esa noche. En esa fiesta había mucha gente que, para nosotras, para la familia, tiene todo que ver con la desaparición de Caroline”.
El 14 de marzo de 2015 se perdió su rastro. Tenía 14 años. La esperan, y buscan, desde hace diez. Una década marcada por el dolor, la incertidumbre, el desconsuelo. Una década sin respuestas. El caso Caroline del Valle, la menor desaparecida en Sabadell, es el primero de los siete que aborda En Paradero Desconocido, el pódcast quincenal de Prensa Ibérica que se ha estrenado este 23 de octubre y que pone el foco en las desapariciones más impactantes, y aún sin resolver, de nuestro país.
Caroline, la niña que desapareció entre mentiras recoge la voz de Isabel y Ana, madre y tía de la menor. Ambas narran el dolor, el nervio y el miedo. Describen de forma cronológica cómo van descubriendo que Carol no está y, lo peor, cómo van desarrollándose una serie de acontecimientos que les hacen temer que no va a regresar.
En el segundo episodio de la entrega, Isabel y Ana, madre y tía de Carol, son firmes: “a Caroline la sacaron del país”. Ambas abordan cómo continuó la investigación tras los primeros días y dan detalles que estremecen nada más oírlos: “la secretaria judicial delante de la abogada que teníamos entonces le dijo a mi madre: señora, no busque más a su nieta. Su nieta está en el vertedero y la han descuartizado. No la busque más”.
“No busque más a su nieta. La habrán violado, la habrán matado, tirado al contenedor de basura… Habrá llegado el camión, le habrá triturado y está en el vertedero”
Sin filtros, cuentan cómo han combatido contra todo y se detienen en momentos dolorosos en los que sintieron, afirman, que se añadió más dolor al dolor. “Mi madre fue a al juzgado a denunciar porque le habían mandado unos mensajes muy fuertes, la gente se pasaba mucho en aquella época, y más con ella, pobrecita”, denuncia Isabel. “Le mandaron unos mensajes muy fuertes, muy amenazadores, y cuando mi madre fue a denunciarlos… La secretaria judicial, delante de la abogada que teníamos entonces, le dijo a mi madre: señora, no busque más a su nieta. Su nieta está en el vertedero y la han descuartizado. No la busque más. La habrán violado, la habrán matado, tirado al contenedor de basura… Habrá llegado el camión, la habrá triturado y está en el vertedero”. Isabel hace una pausa.
El momento lo completa Ana, tía de Caroline, “ahora busque usted en los basureros… A ver qué va a encontrar, es que eso es imposible, eso no se va a encontrar… los cachos. A mi madre fue como terminarla ya de rematar”.
El coche rojo, clave en la desaparición
Madre y tía, cuentan en En Paradero Desconocido, hicieron (y aún hacen) una investigación personal. Gracias a ella encontraron datos importantes que hoy se conocen. Gracias a ellas se supo que Caroline del Valle, pese a lo que contó en casa, y narran en el capítulo 1, no había pasado la noche en casa de su amiga Silvia. Supieron que ambas cogieron un tren rumbo a Sabadell. Descubrieron que se montó una fiesta frente a la discoteca Bora Bora, a la que Caroline, por cierto no entró.
En el capítulo dos de Caroline, la niña que desapareció entre mentiras, narran algo más: hallaron que esa noche había un nutrido grupo de chicos junto a ellas, unos veinte. Y que, además, su sumaron tres personas adultas que llegaron, en un coche rojo, después.
“El coche rojo es clave porque en el coche rojo, en esa fiesta había mucha gente que, para nosotras, para la familia, tiene todo que ver con la desaparición”.
Todas las hipótesis abiertas
Desde 2015 Caroline está desaparecida. Sin rastro. En Paradero Desconocido. Sin noticias, sin despedidas, simplemente dejó de estar. Las diligencias policiales, cuestionadas desde el arranque, y las contradicciones de los amigos de Carol, complicaron la investigación. Una década después, nadie ha vuelto a verla.
Durante años la única tesis policial comprendía el homicidio con ocultación de cadáver. A Caroline alguien le había hecho desaparecer. Hoy, una nueva unidad de policía abre las opciones. Son varias las hipótesis que hay sobre la mesa… ¿Le hicieron algo? ¿La sacaron fuera del país? En Paradero Desconocido te cuenta todas las claves de la última noche de Caroline.













