El presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, ha evitado este lunes pronunciarse sobre la polémica reabierta en torno a su comida con la periodista Maribel Vilaplana durante las horas críticas de la dana del 29 de octubre de 2024. La expectación era máxima a su llegada al acto organizado por El Español en Casa Mediterráneo de Alicante, donde más de una veintena de periodistas y cámaras lo esperaban para preguntarle tanto por la nueva versión de la comida como por su posible asistencia al funeral de Estado por las 229 víctimas, previsto para este miércoles en València.
El jefe del Consell ha llegado sonriente, acompañado por el alcalde de Alicante, Luis Barcala, y el director de El Español, Pedro J. Ramírez. Los tres han posado en el photocall junto a la consellera de Innovación, Industria, Comercio y Turismo, Marián Cano, y el secretario general de Casa Mediterráneo, José Manuel Molina. Mazón se ha limitado a saludar con un “buenos días” y un “gracias” antes de entrar al edificio, mientras los periodistas insistían en sus preguntas sobre la información avanzada por Prensa Ibérica que revela que el presidente acompañó a Vilaplana hasta el aparcamiento donde ella tenía su coche tras el almuerzo en el restaurante El Ventorro.
Llamamiento al respeto
Durante su intervención en el acto, Mazón ha evitado toda referencia directa a la polémica, pero ha apelado a mantener “el máximo respeto” en una “semana muy especial para todos los valencianos”. “Es tiempo de buscar la colaboración máxima posible. Tiempo habrá para muchas cosas, incluso para la discrepancia”, ha señalado. El presidente ha pedido “evitar declaraciones como las del Gobierno por respeto” y ha llamado a “poner lo mejor de nosotros mismos para dar el mayor halo de esperanza a quienes la están buscando”.
El dirigente popular ha reprochado al Ejecutivo central la falta de inversiones en la provincia de Alicante y ha citado proyectos como la estación central del TRAM o la construcción de vivienda pública en el barrio Miguel Hernández. “Hemos puesto en marcha la reconstrucción pese a la falta de financiación y de inversión”, ha asegurado. También ha recordado que “hay más de veinte municipios que aún no han recibido ayudas del Gobierno” tras la catástrofe.
“Esta semana recordamos el dolor que convive con nosotros”, ha añadido, antes de subrayar que la reconstrucción “sigue en plena fuerza, aunque es más difícil sin el apoyo del Gobierno y con un infierno fiscal”.
Silencio a la salida
Al término del acto, alrededor de las 10.45 horas, Mazón ha vuelto a ser abordado por una treintena de periodistas y cámaras que lo esperaban a la salida junto a su jefe de gabinete, José Manuel Cuenca. Se le ha preguntado de nuevo por la versión publicada sobre su acompañamiento a Vilaplana, por si se cambió de ropa antes de llegar al Palau y por si acudirá finalmente al funeral de Estado. El presidente ha guardado silencio y ha abandonado el recinto sin hacer declaraciones.
La información que ha reavivado la controversia, difundida este fin de semana por medios de Prensa Ibérica, sostiene que Mazón llegó al Palau de la Generalitat casi a las 20 horas y que fue en ese momento cuando un asesor le advirtió de la magnitud del desastre con la frase “presidente, hay muchos muertos”. Presidencia no ha desmentido este extremo.
El funeral de Estado por las 229 víctimas de la dana se celebrará el miércoles en València con la presencia de los Reyes. El Gobierno y varias asociaciones de afectados han pedido al jefe del Consell que no asista al acto, aunque Moncloa ha confirmado que, por protocolo, se le cursará invitación.
Suscríbete para seguir leyendo













