Después de casi 15 años de espera, el Centro de Atención Integral de Altavista, que se ubicará en el edificio inacabado de la Cruz Blanca en Arrecife, está más cerca de convertirse en una realidad. Este ambicioso proyecto, liderado por Cáritas Diocesana y subvencionado por el Cabildo de Lanzarote con una inversión de 8 millones de euros, cuenta con el apoyo y la colaboración directa del Ayuntamiento de Arrecife y su Oficina Técnica, así como de la Diócesis de Canarias.
Este centro está llamado a ser un referente en servicios sociales de Lanzarote, ya que ofrecerá atención integral a diario a más de 180 personas en situación de vulnerabilidad.
Un proyecto integral para la atención y la inclusión
El futuro Centro de Altavista se configura como una infraestructura de referencia para la atención social en la isla. Entre los servicios previstos se incluyen:
- Residencia para mayores dependientes
- Centro de día
- Comedor social
- Banco de alimentos
- Viviendas de emergencia
- Centro de formación ocupacional
La combinación de estos servicios pretende ofrecer una cobertura amplia y eficaz a distintas realidades sociales, facilitando desde la atención a personas mayores, hasta el apoyo básico a colectivos en situación de vulnerabilidad.
Maciot Cabrera (d) y Maite Corujo en una reunión junto a Echedey Eugenio (c), teniente de alcalde y Jacobo Lemes. / La Provincia
Colaboración institucional
La aprobación este viernes, 24 de octubre, del informe técnico favorable por parte de la Oficina Técnica municipal, dirigida por el concejal de Urbanismo Maciot Cabrera, supone un paso decisivo hacia la materialización de este espacio social. La iniciativa será elevada a la Junta de Gobierno Local el próximo 29 de octubre para su aprobación definitiva.
La aprobación del informe favorable es el resultado de un trabajo conjunto entre el Cabildo de Lanzarote, la Diócesis de Canarias y la Oficina Técnica municipal.
El arquitectónico proyecto contempla un edificio de dos plantas y sótano, de 5.781 metros cuadrados de superficie total y una altura máxima de 6,33 metros, cumpliendo las normativas urbanísticas vigentes, tal como detallan los informes técnicos.
Un modelo al servicio de las personas y el barrio
La rehabilitación de la Cruz Blanca significa mucho más que la simple transformación de un edificio; representa la recuperación para la comunidad de un espacio históricamente abandonado. Según la concejala de Bienestar Social, Maite Corujo, este nuevo centro complementará la actual red de servicios sociales de Arrecife y dinamizará una barriada entera, reforzando los recursos disponibles para atender a los colectivos más desfavorecidos.
Próximos pasos hacia la revitalización social y urbana
La Junta de Gobierno Local revisará en su próxima sesión la propuesta para formalizar la licencia de obras, proceso que contará con todas las garantías legales y técnicas. Este visto bueno permitirá iniciar la fase final de la intervención, que supondrá no solo la recuperación material del edificio que inició en su día la congregación de la Cruz Blanca, sino también la consolidación de un recurso fundamental para la atención e integración social en la capital de Lanzarote.















