Sigue el lío en torno al Villarreal – Barça que se celebrará en Miami el próximo 20 de diciembre. El Real Madrid ha presentado una nueva denuncia al Consejo Superior de Deportes para que frene el traslado del encuentro. Esta protesta se suma a las acaecidas este fin de semana, cuando los jugadores de los 20 clubes de LaLiga se negaron a jugar los primeros 15 segundos de cada partido de la competición.
Esta denuncia es la segunda que traslada el Real Madrid al CSD. La primera fue enviada hace dos meses, en agosto, y el ente gubernamental todavía la está valorando. Por ello, el club blanco ha decidido realizar una segunda protesta con el mismo argumentario. El CSD, antes de dar una respuesta a la reclamación del Real Madrid, pidió información a la RFEF para conocer si el partido de Miami incumple alguna normativa. Por su parte, la entidad federativa solicitó a cambio documentación sobre la denuncia realizada por el Real Madrid.
Asimismo, el organismo presidido por José Manuel Rodríguez Uribes envió de nuevo un escrito a la RFEF el pasado 6 de octubre, mismo día en que la UEFA autorizó el duelo, en el que volvía a pedir si la disputa del partido fuera de España supone una infracción de la normativa o de los reglamentos de la institución. El estamento federativo respondió recientemente al escrito, y reclaman al CSD que les haga saber qué actuaciones administrativas tiene previsto llevar a cabo.
Inicialmente, el CSD creía que no tenía permiso para prohibir el duelo en Estados Unidos, pero la denuncia del Real Madrid ha obligado al ente gubernamental a estudiar el caso. Por ese motivo, el Gobierno ha comenzado a buscar en la normativa de la RFEF para descubrir si existe algún tipo de incumplimiento en el partido de Miami. Una vez el CSD sepa si tiene la potestad para autorizar o vetar el duelo fuera de España, llegará la respuesta al Real Madrid, que mantiene que «el encuentro adultera la competición».