La Catedral de Mallorca, uno de los monumentos más visitados de la isla, vuelve a ser protagonista de un debate sobre el código de vestimenta para acceder a lugares de culto. En esta ocasión, el caso no ha derivado en críticas ni quejas, sino en una reflexión viral por parte de la visitante mexicana Frida Espinosa, quien compartió en redes sociales su experiencia después de que se le pidiera cubrirse los hombros antes de entrar al templo.
“Hoy por primera vez me pidieron, en una catedral católica, que me cubriera un poco más para poder entrar. Yo soy católica y estas son mis reflexiones”, empieza explicando en el vídeo, grabado tras su visita al monumento.
“Me apenó no haberlo pensado antes”
Frida relata que, mientras compraba la entrada, una trabajadora le indicó amablemente que debía cubrirse un poco los hombros y el escote. “Me quedé pensando y me apenó muchísimo darme cuenta de que, por el calor o por no planear bien mi visita, no había tenido en cuenta el respeto que merece entrar a un lugar santo”, confiesa.
Lejos de molestarse, la joven asegura haber comprendido la norma. “Las iglesias no son centros turísticos sin más, no son museos. Si bien contienen mucha historia, arte y arquitectura, son lugares de fe. No puedes entrar como si estuvieras yendo a la piscina”, señala en su vídeo, en el que también critica a quienes se quejan de estas medidas. “La queja de muchas mujeres que dicen que quieren entrar a la catedral y demás se me hace irracional, porque para entrar a casa de cualquier persona tú también tienes que cumplir sus reglas”, añade.
Un contraste con otras experiencias recientes
Su postura contrasta con la de otra visitante cuyo acompañante, hace solo unas semanas, denunció públicamente que se le negara la entrada a la Seu por el mismo motivo. Su testimonio generó un fuerte debate sobre si debía exigirse o no un código de vestimenta a los turistas que visitan la Catedral.
En el caso de Frida, sin embargo, la respuesta del público ha sido muy diferente. Muchos usuarios han elogiado su tono respetuoso y comprensivo, destacando que su vídeo recuerda la naturaleza espiritual del monumento más emblemático de Palma.