La rapidez con la que ha actuado la Policía Nacional en el saqueo más importante que ha sufrido el cementerio de Torrero en Zaragoza va a permitir a las familias afectadas recuperar la práctica totalidad de los objetos sustraídos. Imágenes de la Virgen, de Cristo, cruces y hasta los marcos donde reposan las fotos del difunto fueron arrancados durante días y estuvieron a punto de venderse en el mercado como material fundido. Pero la celeridad en la intervención y el arresto de todos los responsables de esta operación lo ha impedido y ahora ese retorno a las familias es posible.
A raíz de la detención se lograron incautar 1.600 kilos de estos objetos fabricados en hierro, cobre y latón, el material que los ladrones buscaban en el interior del camposanto. Esto se traduce en centenares de piezas que ahora «se están inventariando» mientras se decide cómo articular la manera de que los ciudadanos que se hayan visto afectados puedan consultar las imágenes de todos ellos o incluso verlos ‘in situ’. Pieza a pieza se podrán ver en imágenes para ir localizando a sus legítimos propietarios.
Para ellos, probablemente, no pondrá fin a este doloroso robo en los nichos de sus seres queridos, pero al menos recuperarlos puede ayudar a mitigar el dolor. Opciones puede haber muchas de hacerles llegar estas imágenes, incluso se está barajando la posibilidad de exponerlos en un espacio de acceso público en alguna de las instalaciones de la propia Policía Nacional en Zaragoza pero el volumen de objetos es ingente y no hay nada decidido de momento.
Mientras, la investigación sigue su curso y por ahora es imposible garantizar que ningún objeto se haya podido escapar a la incautación policial. Los detenidos ya han pasado por comisaría y por el juzgado aunque se negaron a declarar y acabaron puestos en libertad con cargos por los hechos por los que fueron arrestados.
De momento, se espera que en los próximos días se anuncie oficialmente el canal para dar a conocer estos objetos que ya descansan en paz en manos de la Policía Nacional y a salvo de los ladrones. Un proceso de retorno a sus legítimos propietarios que puede prolongarse durante muchos días o semanas, pero que finalizará con éxito si alivia a las familias afectadas, que ahora siguen trabajando en cómo restaurar los daños en las lápidas saqueadas.
Tampoco se conoce por ahora si el ayuntamiento tiene pensado ofrecer su ayuda para agilizar esos trabajos cuanto antes, sobre todo pensando en la proximidad de la celebración del Día de Todos los Santos que es cuando más personas acuden al cementerio a visitar a sus seres queridos y depositar flores en unos nichos que aún hoy siguen destrozados por la acción de estos vándalos.